Crimen de Asunta

«Sospecho que mi hijo ha encubierto a su exmujer»

Ramón Basterra, abuelo de la menor asesinada, asegura en una entrevista que Asunta y su padre estaban muy unidos: «La niña estaba todo el rato con él»

«Sospecho que mi hijo ha encubierto a su exmujer»
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Ramón Basterra, abuelo de la menor asesinada, asegura en una entrevista que Asunta y su padre estaban muy unidos: «La niña estaba todo el rato con él»

Vive lejos de su hijo y de su nieta, sin embargo, el abuelo de Asunta Basterra Porto conocía cada uno de sus pasos. Hablaba con Alfonso prácticamente cada día y le iba contando cada uno de los pasos que daba su nieta. Ramón Basterra no podía disfrutar de su nieta como a él le gustaría porque vive lejos de Santiago de Compostela, tiene su residencia en Bilbao, la ciudad que su hijo abandonó hace unos veinte años para trasladarse a Santiago de Compostela donde siguió ejerciendo su profesión de periodista. En la ciudad del Apóstol también conocería a la que sería el amor de su vida, Rosario Porto, con la que se casó tras un par de años de noviazgo y cuyo matrimonio duró algo más de 15 años.

Ramón concedió una entrevista ayer al programa de Telecinco, «Abre los ojos», y confirmó lo importante que era Charo –como conocen a la madre de Asunta en su entorno más cercano– para su hijo: «Sospecho que mi hijo, que está enamoradísimo, ha intentado encubrirla». Desde el sofá de su casa atendió a la cadena mientras intentaba comprender lo que había ocurrido con su nieta y qué tenían que ver sus padres con el trágico suceso. «Su padre salía a pasear con ella cada día», explicaba el anciano. «Más atento y más sacrificado que él no se puede ser», añade el padre de Alfonso que fue enviado a prisión tras prestar declaración ante el juez José Vázquez Taín el pasado viernes, tres horas después de que lo hiciera su ex mujer.

A pesar de la distancia que separaba al abuelo de su nieta, éste conocía cada uno de los pasos que daba la pequeña. Su padre no dudaba en llamarle para contárselo. «Era muy lista. Con sólo doce años hablaba inglés perfectamente y su padre me dijo que iban a apuntarle a clases de chino», asegura el abuelo que aún hoy no entiende qué pudo pasar para que sucediera una tragedia como la que está viviendo su familia. Otro de los datos que le comentó el padre de Asunta era lo alta que estaba: «Me dijo que en los últimos meses había pegado un estirón enorme». Y es que, al otro lado del teléfono, no parecía que hubiera problemas, «la niña estaba todo el día con él», insiste el entrevistado.

A lo largo de su intervención, Ramón Basterra muestra una gran afinidad con su hijo, le tiene mucho cariño y sabe que la situación en la que está envuelto le va a pasar factura: «Es muy sacrificado y cariñoso y lo que ha pasado le va a marcar de por vida». Sabe que la relación que tenían Asunta y su padre era especial. La adoptaron cuando aún era muy pequeña, no había cumplido ni los dos años. Y es que, como apunta el abuelo, la decisión de traerse a la pequeña de China la tomó la pareja tras saber que no podrían tener hijos naturales, ya que era muy probable que Charo pudiera sufrir alguna complicación. El abuelo de la menor asesinada no sabe muy bien cuál era el problema: «Creo que tenía muchas posibilidades de sufrir abortos y por eso decidieron adoptar».

Uno de los puntos sobre los que más se está especulando es el móvil del crimen. ¿Qué pudo motivar a los padres a terminar con la vida de su hija? Ramón Basterra también se une a esos interrogantes, aunque apunta al móvil económico como una de las opciones con más argumentos: «Ella estaba preocupada porque tenía una herencia importante y tenía que liquidar muchas cosas. Tiene tres o cuatro pisos en Santiago de Compostela y una buena finca que le dejaron sus padres. Ahí hay mucho dinero». Sin embargo, a él su hijo nunca le comentó que tuvieran problemas serios para sacar adelante la economía familiar.