Apple TV, ¿sí o no?

Somos cinco en casa, los adultos, dos adolescentes y una niña de tres años. La llegada de la Apple TV fue como unos Reyes demorados. Es sencilla de conectar (no dejamos que lo hiciera la menor pero sí pudieron hacerlo sencillamente los otros dos, sin leer las instrucciones) y de poner a prueba. Y aquí llegan los problemas: todos querían el mando y le hablaban a Siri al mismo tiempo. Pobre mujer. Porque sí, a la Apple TV se le puede hablar a través del mando y pedirle que busque series, que retroceda, que ponga subtítulos. Cuenta con giroscopio, acelerómetro y un área táctil. Es un mando de la Wii, hasta tiene una correa de seguridad (muy recomendable su uso) para no arrojarla a la pantalla en un rapto de frenesí lúdico. Si viniera con otro mando más para pantallas de multijugadores, sería más interesante aún. De hecho, ésta es una de sus grandes ventajas: los juegos. Apple TV es más un centro de entretenimientos que un recurso para ver mejor la televisión.

El mando se transforma rápidamente en un control para juegos que se descargan de iTunes y funciona de modo muy correcto. El otro lado de este filo es que Apple TV no colabora con la televisión en directo: un partido de fútbol, una serie en vivo o cualquier programa de televisión resultan incompatibles con el dispositivo que no puede hacer nada con ellos, ni rebobinar, ni dejar en pausa...

Volviendo al tema familiar, afortunadamente es compatible con Netflix y cada usuario puede conservar sus perfiles. Es sencillo de personalizar e inteligente a la hora de las recomendaciones. Eso sí, para compartir contenido es imprescindible contar con otro dispositivo Mac, sea un iPhone, un portátil o una tableta. El sistema operativo, tvOS, es similar al de los últimos smartphones de Apple y permite «precisa sería la palabra adecuada» la conexión AirPlay para ver fotos del teléfono. De lo contrario, si en el hogar no hay otro gadget de la marca, no tiene mucho sentido hacerse con un Apple TV.

También es una consola de juegos mucho mejor de lo esperado. Aunque todavía falta contenido específico y animar un poco más a los desarrolladores, las opciones son enormes, el mando funciona de maravilla: los niños de la casa (el padre y el hijo) estaban encantados, sobre todo con aquellos de multijugadores online. Los juegos no son los mismos que se utilizan en plataformas móviles. Son más sofisticados, mejores gráficos y toman más tiempo.

Una gran ventaja que tiene es que no se limita a buscar contenido en iTunes, a veces ni siquiera lo pone como primera opción. Si buscamos una película o serie y ésta se encuentra en Netflix, será la primera opción (si estamos suscritos). Y, en relación al contenido, primero, el sistema operativo borra automáticamente el contenido más viejo para dejar sitio al nuevo, así que, atención con esto. Los juegos ocupan mucha memoria y la opción del modelo de 32 GB puede quedarse corta. Sobre todo teniendo en cuenta el cada vez mayor interés de los desarrolladores en esta plataforma. En síntesis, la familia encantada con algo que ofrece nuevas opciones, pero que tampoco habíamos echado en falta hasta ahora.

Votos por el «sí»

- Es una nueva forma de entretenimiento que combina videojuegos, aplicaciones de educación, así como contenido propio (fotografías y vídeos) y que, además, funciona de maravilla.

- Siri es un anfitrión, como mínimo, igual de útil que en los iPhone. Es sencillo interactuar con la inteligencia artificial, con el sistema operativo y con su menú.

- Funciona de modo sencillo, rápido e intuitivo.

- Una vez activada la función AirPlay, compartir contenidos, música y preferencias es fácil.

- El mando, a pesar de tener pocos botones, es muy efectivo. Más de los que aparentan las primeras impresiones. Tanto para controlar la televisión como para actuar en los videojuegos. Es más leal con el consumidor que con la marca: siempre que el contenido buscado estuviera disponible más rápidamente o de modo gratuito, en alguna otra plataforma, la opción era presentada como primera.

Votos por el «no»

- Es casi imprescindible contar con algún dispositivo Mac en el hogar, de lo contrario no se aprovechan todas las capacidades. Como recurrir al smartphone como segundo mando, algo que los usuarios de Android no podrán hacer.

- No reproduce vídeos en 4K. Algunos pueden no darse cuenta de la calidad, hasta que notan la diferencia con otros dispositivos (Amazon TV, Google y Roku) que son más económicos y sí lo permiten.

- Le importa la televisión en directo tanto como un teléfono analógico. Y teniendo en cuenta que aún pasamos mucho tiempo frente a la pantalla, es un obstáculo importante.

- No reemplaza a la Xbox One o a la PS4. Aunque su capacidad para convocar al juego es muy alta, se trata de una aproximación que aún no es tan «profesional» como la de las plataformas exclusivas.

- Su precio. El gasto puede ser alto considerando el resto de ofertas de la competencia y los servicios que Apple TV no ofrece.