Vacaciones

Vacaciones, gran invento

Estamos en época de descanso estival. La mayoría de españoles andamos de la ceca a la meca en un intento de cargar pilas. Nuestro tiempo de vacaciones está por encima de la media mundial

España está por encima de la media mundial en días de vacaciones remuneradas. 22 frente a 17
España está por encima de la media mundial en días de vacaciones remuneradas. 22 frente a 17larazon

España, abierta por vacaciones. Es un conocido y manido eslogan que viene a decir que el país no para por mucho que sus conciudadanos se encuentren en una rotación veraniega de merecido descanso. Coincide esta época de éxodo estival con el recuerdo o la referencia de una suerte de leyenda negra sobre si los españoles disfrutan de excesivos días libres. De hecho, ese mensaje difamatorio e injusto se ha llegado a instalar por momentos en el imaginario colectivo de nuestra sociedad, que lo hemos asumido acríticamente con naturalidad. Ayuda, sin duda, ese pecado tan cercano que es la envidia, que para algunos pocos, muchos, resulta incontrolable respecto de las personas de su entorno o incluso de las ajenas a su entorno. Pero, de nuevo como en tantas otras verdades sobreentendidas o conceptos preconcebidos, tampoco se fundamenta en la realidad que vivimos y compartimos. Las estadísticas desmienten con rotundidad que los españoles seamos unos privilegiados en esto del descanso remunerado y que pasemos por este valle de lágrimas en una suerte de homenaje a la molicie y al ocio. Pues «nanai de la china». Disfrutamos de un periodo normal entre los países homologables con el nuestro. En nuestro particular registro de reposo se anotan por ley 22 días laborables libres al año sin contar festivos ni domingos. O lo que es igual, 30 días naturales con independencia del puesto y la antigüedad. En este punto, estamos por encima de la media mundial, que se sitúa en 17 jornadas y media, según el Banco Mundial. Lo cierto es que no tenemos muchas razones para la queja. Podríamos estar mejor, pero hay otros muchos estados que están peor, mucho peor. En Francia y Finlandia se disfruta de 35 días naturales y se encuentran entre las naciones «paradisíacas». Lo comparten con una nómina variopinta y desigual en los que figuran Baréin, Guinea, Nicaragua o Togo, pero estos, claro, son otra historia. Y luego están Canadá o China, que son casos aparte. El primero sólo tiene reconocidos diez días y los chinos, pues cinco, aunque muchos me parecen por lo que sabemos de lo que ocurre allí. Otra rara avis es EE UU, donde el descanso no es un derecho, sino un privilegio y es discrecional. Pues lo dicho, buenas vacaciones y tengan cuidado ahí fuera.