Sucesos

Incendio de Gran Canaria: 10.000 hectáreas ya afectadas y cerca de 9.000 personas evacuadas

El riesgo es que el fuego llegue también a la reserva natural de Inagua, un espacio de pinares al igual que el Parque Natural de Tamadaba.

Labores de extinción del incendio de Valleseco en Canarias/ap
Labores de extinción del incendio de Valleseco en Canarias/aplarazon

El riesgo es que el fuego llegue también a la reserva natural de Inagua, un espacio de pinares al igual que el Parque Natural de Tamadaba.

Es el incendio más voraz que se recuerde en Canarias, y el más importante de España en lo que va de año. Así lo demuestra el despliegue técnico aéreo y terrestre que tiene lugar en Gran Canaria.

El temor ahora es que con el cambio de viento producido durante la tarde-noche, el fuego llegue a la reserva natural de Inagua. Uno de los datos más tranquilizadores es que el flanco de la zona norte (San Mateo y Valleseco) se ha ido controlando y la preocupación se centra en la dirección sur que está tomando el fuego, hacia Mogán, La Aldea y San Bartolomé de Tirajana; además del Pinar de Tamadaba.

El presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, junto al ministro en funciones de Agricultura, Luis Planas, informaron que se han descargado más de un millón de litros de agua y solo los cuatro hidroaviones de la UME han realizado 133 descargas.

Un total de 10.000 hectáreas afectadas, cuatro mil más en un día, y se espera que durante la noche la cifra siga aumentando. Además, el perímetro del incendio aumentó también a 75km y alrededor de 9.000 personas han sido ya evacuadas.

Por su parte, el jefe de Emergencias del Cabildo insular Federico Grillo señaló que el cambio de viento, el descenso de la temperatura y el aumento de la humedad favorecerán en cierta medida las labores de extinción, pero advirtió de que la situación sigue siendo complicada.

El problema, además de que pueda llegar a la zona de Inagua, está en que la tendencia del viento ha hecho girar el fuego hacia el Roque Nublo y el Roque Bentayga, y que la cuenca de Tejeda siga dando la batalla y se pueda reactivar. “El fuego está haciendo lo que más le gusta, devorar, y tenemos que seguir en alerta”, añadió.

La prioridad sigue siendo la seguridad de las personas y de los núcleos de población y evitar que la zona sur a la que se dirige el fuego contamine el ambiente con gases nocivos. Las evacuaciones preventivas serán la tónica durante la noche.

“Este incendio lo vamos a ganar, pero es un trabajo muy complicado”, añadía el ministro Planas, quien quiso agradecer las labores que están realizando todo el personal del operativo. Anunció que ya están funcionando los drones de última generación durante la noche “que nos dará una fotografía en tiempo real de las afectaciones y de los puntos calientes”, dijo.

Este miércoles se sumarán dos helicópteros pesados Kamov aportados por el Estado, además de otras dos aeronaves procedentes de Castilla La Mancha. De momento no hay reportes de daños personales y de viviendas. Aún es pronto para hacer balance de afectaciones a las infraestructuras.

El presidente canario insistió en que se trata de un incendio “tremendamente serio, de gran envergadura y que a pesar de todos los medios dispuestos ha aumentado en 4.000 hectáreas más”.

Arde Gran Canaria

Un incendio tremendamente virulento y con condiciones meteorológicas adversas, con temperaturas de 40 grados y vientos de más de 30 kilómetros por hora y una humedad por debajo del 30%. Esas son las condiciones a las que se enfrentan más de 600 efectivos para sofocar uno de los incendios más graves que ha tenido Gran Canaria en los últimos años.

Durante el día de ayer, el Gobierno de Canarias pidió tres aviones máspara controlar la expansión del fuego ante la falta de medios para controlar las llamas. La de la falta de una base de hidroaviones en Canarias es, de hecho, una de las mayores demandas de la población.

Tanta es la polémica generada, que unos vecinos han impulsado una petición en Change.org para solicitar una base permanente en el archipiélago para emergencias como ésta. Por una parte, algunos técnicos forestales señalan que no es necesario porque la orografía de la isla no permite que este tipo de aviones se muevan con normalidad. Otros añaden que, teniendo en cuenta la lejanía del archipiélago, y siendo ocho islas, justificaría su presencia.

Ayer se volvió a insistir en la necesidad de la prevención durante todo el año, ya que el pino canario produce «pinocha», que es la acídula de dicho árbol y que va cayendo durante todo el año. A pesar de que hay forestales del cabildo retirándola con periodicidad, para muchos no es suficiente.

Aunque no se trata de abrir más frentes, lo cierto es que este incendio originado en Valleseco, ubicado entre la medianía y cumbre de Gran Canaria, es el tercero en una semana.

Cunde la incertidumbre

La mayor preocupación, no obstante, es que las llamas no se cobren vidas humanas, por lo que se evacuaron más de 40 núcleos urbanos. «La espera es lo peor, no saber hasta cuándo volveremos a casa», dice Francisco Espino, uno de lo trasladados al pabellón municipal de San Mateo.

Con cara de resignación y cansado, asegura que le preocupa qué pasará con los animales que dejó atrás. Está junto a Antonio González, su vecino del pueblo. Nos cuenta que es la segunda vez que tiene que desalojar su casa en una semana. La incertidumbre es lo peor. Apoyado en su bastón espera que las noticias en las próximas horas sean más positivas. El incendio ha provocado también la solidaridad de los canarios.

Otros lugareños como Tania y David no han dudado en acercarse a hacer bocadillos y repartir comida y agua. «Lo que más me impresiona es ver a las personas mayores, que están más impedidas», dice. Tania es otra de las decenas de voluntarios que se han lanzado a ayudar. Sentada a la entrada de la piscina municipal espera la hora en que empiecen a preparar la cena a los evacuados en el municipio de San Mateo.

Sus ojos muestran cansancio y preocupación. «He llorado mucho. No solo porque tenga familiares de Tejeda evacuados aquí, sino por ver el daño que ha causado el fuego en la cumbre y a nuestros pinos». Recuerda que hace dos años hubo otro fuego, pero que no se compara con lo que está pasando ahora. Mientras hablaba, un familiar le avisa por teléfono del conato de otro que se había desatado en el municipio de San Mateo, desde donde se veía el humo proveniente de la cumbre.

Catástrofe ambiental

Los peores presagios se han cumplido. Que el fuego desatado el pasado sábado en el centro de la isla, y que ha afectado ya a ocho municipios, llegara a una de las zonas de mayor riqueza natural, el Pinar de Tamadaba.

Hoy por hoy es una área que se da por perdida porque debido a la voracidad del fuego “sería un suicidio entrar ya que hay tormentas de fuego de 50 metros”, señaló el responsable de Emergencias del Cabildo insular, Federico Grillo, en la última rueda de prensa. Y tan solo ese parque tiene 7.538 hectáreas de flora y fauna autóctona.

El fuego es imparable. Grillo lo dejaba claro. “No hay capacidad humana de extinción”. El área es catalogado por los técnicos como "zona del hombre muerto", espacio donde no hay posibilidad de actuar sin riesgos para los efectivos.