Yo para ser feliz quiero... Lo que los españoles necesitan para ser felices

¿Dinero?, ¿salud?, ¿amor? Estas tres cuestiones son las que aparecen en cualquier conversación sobre la felicidad. Sin embargo, la realidad no es del todo así. Según el índice para una Vida Mejor, elaborado por la OCDE, establece 11 indicadores que definen el bienestar y los españoles considera que los más imprescindibles son la salud (11 por ciento), la educación (10,4) el balance vida-trabajo y satisfacción ante la vida (9,5 en ambos casos). Curiosamente, el empleo figura en quinto lugar, con un 9,3 por ciento, seguido por la seguridad (9,2), el medioambiente (8,9) y la vivienda (8,7). Entre los temas que menos importan a los españoles para lograr una vida mejor son los ingresos (8,3 por ciento), la comunidad (7,9) y el compromiso cívico (7,7).

Desde su lanzamiento en mayo de 2011, el índice para una Vida Mejor ha recibido más de siete millones de visitas y más de 15 millones de consultas. De ellas, 189000 lo han hecho desde España, que se coloca en novena posición en tráfico. Los accesos se producen principalmente desde Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Granada. Los resultados del índice se han elaborado en base a la opinión de 2.800 visitantes de la web en España. El índice deja claro que el resultado no representa a todos los españoles y que son indicativos, aunque aborda algunos de los recursos que determinarán el bienestar de la gente en el futuro. Entre ellos, incluye otros aspectos como la confianza en otras personas como un componente importante del capital social. En España, la confianza en otros es superior al promedio de la OCDE y se sitúa en un 6,3 sobre 100, frente al 5,8 de promedio en la OCDE.

De forma paralela, el informe analiza la situación real de nuestro país e indica que en los últimos años se han afrontado varios retos en relación con el bienestar material de los habitantes. Así, recuerda que el ingreso familiar disponible promedio per cápita y el ingreso promedio cayeron de manera importante entre 2009 y 20013 y que los empleados españoles tienen muy poca seguridad en el empleo. Entre 2009 y 2014, la tasa de desempleo de largo plazo aumentó 8,7 puntos porcentuales hasta un 12,9 por ciento, la segunda tasa más alta de la OCDE.

El balance vida-trabajo y salud es relativamente bueno. La esperanza de vida se sitúa en 83,2 años, una de las más altas de la OCDE, mientrsa que el tiempo dedicado al ocio y al cuidado personal por los empleados a tiempo completo también es más alto que el promedio.

Respecto al logro educativo, España se coloca en el nivel más bajo de la OCDE, ya que sólo el 55 por ciento de los adultos en edad productiva terminaron la educación media superior, cifra que en la OCDE se sitúa en el 77,2 por ciento. Las competencias de los adultos en lectura y matemáticas también son bajas. en cambio, en redes de apoyo social, se sitúa en la parte alta con un 94,7 por ciento, frente al 88 por ciento de la OCDE.

En el apartado del bienestar de los menores, la tasa de pobreza se sitúa en el 21,7 por ciento, una de las más altas de la OCDE. Por el contrario, la tasa de salud es de las más altas y la de suicidios entre adolescentes es la segunda más baja. Respecto a estos adolescentes, el 10,7 por ciento de los jóvenes de 15 a 19 años no trabaja, frente al 7,1 de la OCDE. las competencias en lectura y de solución creativa de problemas también está por debajo de la media. Estos datos contrastan con la sensación de seguridad personal de los niños, que está en el extremo superior de la OCDE, algo que también ocurre con la opinión que tienen sobre la satisfacción ante la vida.