Fandiño, primera oreja en la Virgen Blanca

Una solitaria oreja por parte de Iván Fandiño fue el parco balance del arranque de la Feria de la Virgen Blanca en Vitoria, donde el deslucido y justísimo de fuerzas encierro de Albarreal fue un muro infranqueable para la terna que estuvo muy por encima del ganado.

Así, Fandiño logró cortar la oreja del quinto al que buscó una y otra vez las vueltas hasta lograr un trasteo lleno de firmeza y entrega que el público supo valorar. Con el tendido metido en faena, Fandiño no perdonó con la espada y paseó el trofeo. Se le había resistido en el primero d su lote, al que trató de sostener a media altura, ya que sus pocas energías hacían imposible someterlo por abajo.

Castella también puso muchas ganas en su lote y estuvo cerca de la oreja en el que abrió plaza. Ceremonioso, estuvo templado y solvente con la franela en un trasteo al que faltó más pimienta por parte del astado. Saludó una ovación como en el cuarto, al que despachó de media estocada después de una labor persistente que no encontró colaboración alguna de su rival. Talavante fue silenciado después de cargar con el lote de menos opciones de un encierro ya de por sí en los límites.

En la plaza de toros de Vitoria, primera de la Feria de la Virgen Blanca, en la que se lidiaron toros de Albarreal, muy desiguales de presentación. Nobles, pero blandos y desrazados, sin clase para la muleta. Ofrecieron más opciones 1º y 2º. Sebastián Castella, saludos tras petición de oreja y saludos tras aviso; Iván Fandiño, saludos tras petición de oreja y oreja; y Alejandro Talavante, silencio en ambos. Un tercio de entrada.