La Comunidad de Madrid acoge la biblioteca Carriquiri

Integrada por 10.000 obras recopiladas en 18.000 volúmenes, Carriquiri es una de las más importantes colecciones bibliográficas taurinas privadas del mundo, propiedad del abogado, empresario y ganadero Antonio Briones Díaz. El objetivo del Gobierno regional es custodiar estos fondos y ponerlos a disposición de cuantos estudiosos y aficionados taurinos quieran consultarlos. Rollán agradeció la "generosidad y labor de mecenazgo"desarrollada por Briones, "que ha cedido de manera generosa y desinteresada esta biblioteca para que pueda ser consultada por los numerosos aficionados al toreo que hay en la Comunidad de Madrid". "Gracias a su pasión y tesón cultural, Briones ha sido capaz de recopilar la mayor biblioteca de toros privada del mundo, junto a la de Morelia en México", señaló. El Gobierno regional dotará a la Sala José María de Cossío de la plaza de Las Ventas de los necesarios medios materiales que garanticen las condiciones de seguridad y conservación establecidas en el convenio suscrito hoy, así como del mobiliario y personal necesario para su buen mantenimiento. Este convenio de cesión y custodia de los fondos Carriquiri tiene una duración de cinco años, prorrogables por otros cinco, hasta un máximo de dos veces, sin que la duración total del mismo exceda los 15 años de duración. La Comunidad de Madrid tiene un plazo de nueve meses para acometer las actuaciones necesarias para adaptar e incorporar los numerosos fondos de la biblioteca Carriquiri a la Sala José María de Cossío, que cuenta en la actualidad con unos 3.000 títulos y 4.000 ejemplares. Durante este periodo se procederá a una revisión del inventario y catálogo del fondo bibliográfico que se va a recibir, a efectos de su recepción formal.

Gracias a la cesión de la familia Briones, la actual Sala José María de Cossío en Las Ventas sumará 18.000 nuevas piezas, incluyendo libros, colecciones de revistas, grabados, cartelería, programas de mano y diversos objetos procedentes del mundo del toro. Destacan sobre el conjunto una primera edición de la 'Tauromaquia' de Goya, fechada en 1816; las Constituciones Sinodales de Toledo del siglo XVI, donde se refleja la queja de los sacerdotes por la celebración de las corridas de toros los domingos; 'Historia del toreo y de las principales ganaderías de España' de Fernando de Bedoya (1850); 'Tauromaquia de Pablo Picasso' (1959), editada por la editorial Gustavo Gili; las obras taurinas de Hemingway traducidas en varios idiomas; o la 'Génesis de una tauromaquia' de Eduardo Naranjo (2014), un libro de arte con algunos grabados de gran calidad, como los cuatro dedicados a Sánchez Mejías.