Descansar bien

¿Dormir completamente a oscuras o con algo de luz? La ciencia tiene la respuesta

La prolongada exposición a pantallas y fuentes de luz en las horas previas al descanso tiene graves consecuencias para la salud

5 acciones que te pueden ayudar a dormir mejor durante la ola de calor | Fotografía de archivo
¿Dormir a oscuras o con luz?La RazónLa Razón

Aunque pueda pasar desapercibido inicialmente, la prolongada exposición a pantallas y fuentes de luz en las horas previas al descanso puede provocar complicaciones en el sueño a largo plazo. El primer indicio de estos problemas es la dificultad para conciliar el sueño, incluso cuando se experimenta cansancio. A la hora de garantizar un estado de salud óptimo, la calidad del sueño desempeña un papel crucial.

Según el especial "Sueño saludable: evidencias y guías de actuación" de la Revista de Neurología de la Sociedad Española de Sueño, dos recomendaciones destacan en relación con la luz en el entorno de sueño. La primera insta a dormir en total oscuridad, evitando que la luz o la televisión permanezcan encendidas, y sugiere el uso de un antifaz en caso de contaminación lumínica exterior. La segunda sugiere mejorar el entorno de la habitación durante el sueño, incluyendo condiciones de silencio, oscuridad y temperatura adecuadas, y propone el uso de antifaces y tapones.

¿A oscuras o con luz?

De acuerdo con este documento, la oscuridad total se presenta como la condición más propicia para un sueño reparador. La razón fundamental es que cualquier forma de luz puede alterar la producción de melatonina, la hormona del sueño. El cerebro está diseñado para regular la actividad de los órganos en función de la luz que percibe, una característica intrínseca a las distintas horas del día.

Si el cerebro detecta que no es necesario segregar melatonina, la hormona del sueño, se elevan los niveles de azúcar y la presión arterial, preparando al cuerpo para la actividad. Esto no solo complica conciliar el sueño, sino que también afecta su calidad, impidiendo que el cuerpo descanse adecuadamente.

A pesar de estos conocimientos, las nuevas tecnologías están contribuyendo a una realidad opuesta, con un aumento notable de personas que sufren de insomnio. Según la Sociedad Española de Sueño, el uso cada vez más frecuente de dispositivos electrónicos está vinculado al crecimiento de este problema, planteando un desafío para mantener hábitos de sueño saludables en la era digital.