Tribunales

De asaltantes en la capilla a cargos públicos de Podemos

Además de Rita Maestre, otros de los acusados por la profanación y las pintadas en la Complutense han ascendido en el partido, como el diputado y senador Ramón Espinar

Rita Maestre, Héctor Meleiro, Marina Montoto Ugarte, Ramón Espinar Merino y Raquel Huerta
Rita Maestre, Héctor Meleiro, Marina Montoto Ugarte, Ramón Espinar Merino y Raquel Huertalarazon

Además de Rita Maestre, otros de los acusados por la profanación y las pintadas en la Complutense han ascendido en el partido, como el diputado y senador Ramón Espinar

Mañana Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento de Madrid, se sentará en el banquillo junto a Héctor Meleiro Suárez, quien fue candidato en las listas de Podemos a la Asamblea autonómica. Ambos deberán responder en los juzgados de lo Penal número 6 de Madrid de un delito contra la libertad de conciencia y los sentimientos religiosos por participar en una protesta en la capilla de la Universidad Complutense el 10 de marzo de 2011. Ambos, junto a otras 50-60 personas entraron en la capilla del Campus de Somosaguas con el objetivo de ofender los sentimientos religiosos de los allí presentes y de todo el colectivo católico, según coincide, el Fiscal y las acusaciones, quienes solicitan un año de prisión para cada uno de ellos.

Lo cierto es que algunos de los que se vieron involucrados, por unas razones o por otras, en el asalto a la capilla o en hechos relacionados con el que se enjuiciará -principalmente las realización de pintadas con frases similares a las coreadas por los participantes del «asalto»- han emprendido una carrera política que no podían entonces ni imaginar. La cercanía a Pablo Iglesias, quien ya entonces tenía cierto «nombre» en los ámbitos más radicales de la universidad, parece que ha tenido sus «frutos». En concreto, al menos cinco de los que tuvieron que declarar por estos hechos han pasado a ocupar, o lo han intentado, distintas responsabilidades dentro de Podemos, de forma paralela a la popularidad e influencia política de su entonces profesor o compañero de docencia.

Hay dos casos más que llamativos, los relativos a la propia Rita Maestre y a Ramón Espinar. La primera se ha convertido en una figura clave del Gobierno de Carmena en el Ayuntamiento de Madrid, del que es, además, portavoz; mientras que Espinar ha pasado a ocupar dos sillones oficiales: diputado en la Asamblea de Madrid y senador, en ambos casos, electo en la lista de Podemos. Ramón Espinar declaró como «imputado no detenido» el día 9 de junio del 2012 ante el juzgado número 1 de Instrucción de Pozuelo de Alarcón, condición que mantuvo hasta el 10 de junio de 2013, cuando el juez decidió su sobreseimiento. En su declaración, negó cualquier relación con los hechos investigados y aseguró que ese día no acudió a la capilla en ningún momento ni estuvo detrás de esos actos.

El compañero de banquillo de Maestre, Héctor Meleiro, también aspiraba a convertirse en representante de los ciudadanos. Su infuencia dentro de Podemos le llevó a ocupar un puesto en la lista también de la formación morada para la Asamblea de Madrid, aunque, a diferencia de Espinar, los resultados no le fueron positivos y se quedó fuera. Pero también había pasado de «la capilla» a las listas electorales del partido de ex director del grupo de teatro de la Facultad de Ciencias políticas.

Sorprende el caso del abogado Jacinto Morano González, que ha sido el defensor de Rita Maestre hasta hace escasos días. Este letrado presentó recientemente su renuncia a continuar con su defensa por incompatibilidad. La razón: es también diputado en la Asamblea de Madrid por Podemos. Su sustituto será Gonzalo Martínez -Fresneda Ortíz -reconocido penalista y el que fuera el defensor de Baltasar Garzón en una de las causas en las que estuvo implicado, y Carlos López-Keller Álvarez.

Otra de las que fueron implicadas en esos mismos hechos fue Eva Muñoz Moreno, quien ahora ha pasado a formar parte de Podemos, y, en concreto, es una de las responsables del área política de este partido. El 26 de septiembre de 2011 declaraba en calidad de imputada ante el instructor de la causa, después de que la Policía le hubiese identificado como una de las cuatro personas que realizaron pintadas en el edifcio de Psicología. Según consta en el atestado policial, formaba parte del grupo de jóvenes que, el siete de marzo, realizaba pintadas en fachada del campus de Somosaguas, y que salió huyendo al percartarse de la presencia policial, junto a sus tres compañeros, ente los que se encontraba Guillermo Errejón, hermano del hoy número 2 de Podemos y secretario político de la formación, Íñigo Errejón. En su declaración judicial, Eva Muñoz negó los hechos y aseguró que sólo con posterioridad conoció que dos de sus compañeros habrían tenido relación con esas pintadas.

Guillermo Errejón también tuvo que declarar, como «imputado no detenido», quien, en cambio, no tuvo reparos en reconocer ante el juez que participó en esas pintadas junto a otra compañera.

Se da la circunstancia de que otros de los estudiantes que tuvieron que declarar como imputados por estas pintadas, Pablo Gabande Tapia, que se presentó a las listas de Sanse Sí se Puede al Consejo Ciudadano de la Asamblea de San Sebastián de los Reyes. Gabande se reconoce como uno de los estudiantes que constituyeron la asociación «Contrapoder», que a las acusaciones han vinculado de alguna forma con el asalto a la capilla, y en su declaración asegura que el día siete de marzo de 2011 sí estaba en la facultad de Somosaguas, aunque no estaba realizndo pintadas, aunque sí que sabe que Guillermo y otra compañera estaban pintando. También declara que cuando le identificó la Policía no tenía ningún spray en las manos, ni éstas estaban manchadas de pinturas. Preguntado porque salió corriendo cuando los agentes les perseguían, añadió que fue por que «hacía unos días había habido una agresión a un compañero y tenía miedo».

Marina Montoto y Raquel Huerta, parte del Círculo feminista de Podemos y del área de Comisiones Democráticas (respectivamente) también fueron imputadas por los hechos aunque el juez decidió su sobreseimiento en 2013, al no encontrar indicios de responsabilidad en los hechos investigados.

El juez ha admitido una prueba que podría ser clave para el esclarecimiento de los hechos. La declaración de Laura G.M., alumna de la UCM, que a principios de abril del año 2012 se personó en la inspección de servicios de la universidad y aportó grabaciones para el expediente académico que abrió la institución a raíz de los hechos. Laura G.M fue testigo directo de los hechos enjuiciados y aportó grabaciones de la entrada y la salida de la capilla, imágenes en las que se aprecia a Rita Maestre. Esta petición fue realizada a la magistrada por la acusacion ejercida por el Centro Jurídico Tomás Moro, quien entendía que el testimonio de esa chica más que relevante.