Coronavirus

Andalucía reclama que todas las provincias pasen a la fase 1 de desconfinamiento salvo dos distritos de Granada y uno de Málaga

Vox vuelve a amenazar con romper el apoyo a la Junta tras el apoyo de Cs al estado de alarma: "Esas discordancias ponen en juego la estabilidad de su Gobierno”. Susana Díaz traslada a Juanma Moreno que no hallará en el PSOE-A “la actitud de Casado y el PP” en el Congreso

El presidente de la Junta, Juanma Moreno
El presidente de la Junta, Juanma MorenoManuel OlmedoManuel Olmedo

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en el primer Pleno pospandemia propiamente dicho tras la comparecencia en Diputación Permanente de la semana pasada, señaló a la líder de la oposición Susana Díaz -que le requirió el plan de desconfinamiento de la Junta- que ha solicitado formalmente al Ministerio de Sanidad su propuesta de desescalada: todas las provincias andaluzas a la fase 1, esto es, 30 de 33 distritos. Los tres restantes: con condiciones, dos en Granada y uno en Málaga.

Las jornadas en los plenos estaban hasta el Covid-19, como el célebre arranque de crónica taurina de Antonio Lorca con cita de Pepe Guzmán , “para coger la escopeta y el perro... y meterse en la cama con el perro”. Los debates a cara de perro han dado paso -confinamiento obliga- a un quorum reducido y un mínimo de inédita condescendencia con el adversario. Todos los partidos parecen que están de acuerdo no en ir meramente a lo suyo, sino que van “a lo de todos”, con la excepción de Vox, un grupo nacido como tercera vía ante Caín y Abel, bajo el signo del hijo único. El portavoz de Abascal en el Parlamento andaluz, Alejandro Hernández, criticó primero “la incoherencia” de Ciudadanos al apoyar el estado de alarma en el Congreso: “Lamentamos que Cs haya puesto en tela de juicio la estabilidad del Gobierno de la Junta por mero tacticismo”. Después, arremetió contra las decisiones del PP a escala nacional y señaló a Moreno: “Pensamos que su partido se equivoca en Madrid, esas discordancias ponen en juego la estabilidad de su Gobierno”. Previamente, Vox fue el único grupo que votó en contra de la comisión de seguimiento para la recuperación de Andalucía, antes de que el portavoz de Presidencia, Elías Bendodo, que es al Parlamento lo que Sergio Ramos al fútbol -igual se muestra expeditivo que saca el balón jugado o mete un gol, funambulista del reglamento-, recordara “el gol de Butragueño en el Mundial del 86” al que el PSOE le puso su logo en los informativos “como ejemplo de manipulación” a la hora de abordar el debate sobre la situación en la RTVA. Varios miembros del Gobierno acudieron al Pleno con el polémico pin de Presidencia, entre ellos, el presidente Juanma Moreno, el consejero de Hacienda Juan Bravo o el de Educación Javier Imbroda. El vicepresidente Juan Marín y el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, optaron por la insignia con la nueva "A" de Andalucía. Bendodo defendió que se trata del diseño de las medallas de Andalucía que otrora entregó hasta un vicepresidente de IU como fue Valderas.

El nuevo pin de la Junta
El nuevo pin de la JuntaManuel OlmedoManuel Olmedo

Juanma Moreno también informó en la Cámara del “luto oficial” en la comunidad. El presidente andaluz confimó que “las relaciones con el Gobierno central son mejorables”.“Me hubiese gustado que se contara más con las comunidades autónomas”, añadió. “La manera de proceder no era la más razonable”, indicó. Moreno se quejó de que no se ha tenido en cuenta la visión del problema desde la región “pero toca colaborar”. Vox insistió en que el tono con que Moreno asume las críticas “es insuficiente” ante “el inefable señor Sánchez”. “¿Cuánto daño tienen que hacer Sánchez e Iglesias para romper este silencio autocomplaciente?”, denunció Vox. Moreno insistió en que “seguirán siendo críticos pero colaborando”. “Mi Gobierno disfruta de buena salud. No hay ninguna grieta. Mi obligación es tener relaciones fluidas con todas las instituciones”, señaló a su socio parlamentario.

Por parte de Adelante Andalucía, Ángela Aguilera reclamó “que se pongan de acuerdo con Madrid” y centró sus críticas en el decreto de simplificación administrativa de la Junta recurrido por el Gobierno, así como por el PSOE-A y su propio grupo. “Quieren acabar con el control público”, denunció ante Moreno, al que definió como “poliédrico”. Moreno se mostró “convencido de llegar a un acuerdo con el Gobierno” y apeló a una “comisión bilateral para discutir esos dos apartados” que ha recurrido el Ejecutivo central: las comunicaciones y el patrimonio. El presidente andaluz confirmó que Andalucía superará “el millón de parados” y reclamó “medidas de choque”, presentando el decreto como vía para la recuperación. “Traen las mismas recetas que Aznar. Hemos desregularizado significa hemos dejado de controlar. Van a hacer de nuestra administración un coladero. ¿Dónde quedó la ‘revolución verde’?", le espetó Aguilera. “Detrás de los trámites hay vidas y familias”, justificó Moreno.

Juanma Moreno, en el primer Pleno durante el estado de alarma
Juanma Moreno, en el primer Pleno durante el estado de alarmaManuel OlmedoManuel Olmedo

El portavoz de Cs en el Parlamento, Sergio Romero, por su parte, arrancó contestando a Vox: “Ni nos gustan ni nos asustan las amenazas. Cs siempre va a elegir la utilidad y la responsabilidad. La alianza por la reconstrucción de Andalucía es un imperativo moral”, indicó. “La edad de la inocencia ya la hemos perdido todos”, dijo directamente a Alejandro Hernández. Juanma Moreno recordó que no reclama “dogmas de fe ni adhesiones inquebrantables” sino “una alianza de toda la sociedad para conseguir reactivar la economía andaluza tras el largo letargo de estos meses” sustentada en seis ejes -educación, con más inversión en tecnología; integración social; economía verde; innovación; digitalización; y empleo y emprendimiento- dentro de una hoja de ruta que moviliza “4.000 millones con la reprogramación de fondos europeos”.

El portavoz parlamentario del PP-A José Antonio Nieto se quejó de que el Estado quite “recursos económicos” y que “la lealtad de la Junta se responda con el recurso al decreto de simplificación”. “En política el peor virus es la soberbia”, señaló.

Susana Díaz, en el Parlamento
Susana Díaz, en el ParlamentoManuel OlmedoManuel Olmedo

Finalmente, la líder de la oposición, Susana Díaz señaló que “entiende y defiende y reinvidica más participación en las decisiones” y pidió lo mismo “para los ayuntamientos”. Díaz preguntó a Moreno por los PCR, el reparto de mascarillas -con la tarjeta sanitaria como Cataluña o Valencia o por correo como Madrid-, por la paga de peligrosidad para sanitarios y personal de atención a domicilio y por el plan de turismo.

El presidente andaluz recordó que “Cs o PP no han votado que no al estado de alarma pese a las notables faltas de lealtad del señor Sánchez con ellos” y se limitó a señala que se está preparando “un paquete de medidas turísticas” pero se precisa “un plan de rescate nacional”. Susana Díaz garantizó a Moreno que “no va a encontrar la respuesta que ha tenido su líder en el Congreso”. El presidente andaluz reclamó a la líder de la oposición que se sume a la petición para un reparto más equitativo de los 16.000 millones anunciados por el Gobierno. “El acuerdo no era un 80-20, en función de la incidencia y el territorio. La ministra de Hacienda sabe que siempre se ha pedido un reparto por población y se cambió el criterio”, denunció. “Un criterio 80-20 no es razonable. Andalucía necesita más recursos. Le animo a que se sume a la petición”, señaló Moreno a Díaz, lo que, tirando de nuevo de la metáfora futbolística de Bendodo, se asemeja a lo que le dijo el 7 del Real Madrid a Valdano el día que puso a Raúl de titular y el técnico le dijo: “Para mí es muy difícil sacarte del equipo”. “Más difícil es para mi defenderte ante mi familia”, contestó el Buitre.