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Sociedad

Rechazo unánime contra el club que veta a «maricones» en el «pueblo de la libertad»

Ayuntamiento, asociaciones y empresarios de Torremolinos denuncian a un local marroquí por promover una fiesta homófoba que iba a tener lugar el 18 de enero

Las «reglas» del establecimiento Casa Fatima Ino publicadas en una fotografía de Instagram La Razón

El club marroquí «Casa Fatima Ino» de Torremolinos desató todas las alarmas cuando el jueves por la noche anunció en sus redes sociales la celebración de una fiesta en la que no se permitían «peleas, drogas, gorras, chanclas y maricones». Se trataba del «reglamento» del establecimiento, por el que también advertían de que la dirección se reservaba el derecho de acceso. La fiesta, bajo el nombre de «Noche Superstar» iba a tener lugar el 18 de enero en la céntrica calle Cruz de la localidad.

Casi de forma inmediata, el municipio, cuna de los derechos Lgtbi y un lugar de referencia para esta comunidad, se convirtió ayer en el centro de todas las miradas en el que las administraciones públicas, asociaciones y empresarios mostraron rápidamente su repulsa y un mensaje común contra este tipo de actuaciones.

La alcaldesa del Ayuntamiento de Torremolinos, Margarita del Cid, fue una de las primeras en dar la voz de alarma e informó de que va a presentar ante la Policía Nacional una denuncia contra el club privado por un delito de odio. Del Cid aseguró que dicha fiesta «no se va a producir en Torremolinos, bajo ningún concepto, los vamos a denunciar por delito de odio y vamos a llegar hasta donde haga falta para desterrar estas actitudes homófobas». Asimismo, lanzó un mensaje de apoyo a este colectivo: «Torremolinos es un prisma de color y de diversidad, es la ciudad donde todo el mundo puede ser lo que quiera ser, y este episodio tan desagradable nos recuerda que no debemos dejar de reivindicar y defender la libertad y los derechos humanos». Igualmente, en el Consistorio no consta ningún permiso ni licencia de actividad comercial u ocasional, por lo que se hubiera tratado de una fiesta ilegal, precisaron desde el Ayuntamiento.

En nombre de todo el sector empresarial y las asociaciones Lgtbi del municipio, el presidente de la asociación de empresarios gays de Torremolinos (Acogat), José Ignacio Martínez, aseguró en declaraciones a LA RAZÓN que es «inadmisible que algo así pueda suceder y, menos aún, en Torremolinos, que es el pueblo de la libertad donde todo el mundo se respeta y el mundo marroquí convive perfectamente con nosotros y 140 nacionalidades diferentes». Además, insistió en que los responsables «no pueden promover la homofobia y mucho menos en un bar o una discoteca».

Según explicó Martínez, ante la reafirmación del empresario, que anunció que pretende seguir con este evento en Málaga capital, «las asociaciones se han puesto en contacto con las autoridades y van a realizar denuncias» para que no ocurran situaciones similares. No obstante, destaca «tanto la unión de la población como la de todas las administraciones, desde Torremolinos hasta el Gobierno, y la sociedad española en general contra la homofobia».

Por su parte, la Junta de Andalucía inició las actuaciones para abrir un expediente sancionador por infracción a los derechos de las personas Lgtbicontra los responsables de la fiesta y no descarta tomar otras medidas oportunas. La actuación se iniciará al amparo de la Ley 8/2017 de 28 de diciembre, para garantizar los derechos, la igualdad de trato y no discriminación de las personas Lgtbi y sus familiares.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, también condenó ayer la «intolerancia» y la «barbaridad» de esta situación y quiso dejar claro que rechaza «cualquier actitud homófoba y los lamentables insultos» que ha recibido la alcaldesa de Torremolinos. «El no –en relación al polémico cartel– se lo decimos todos a la homofobia», sentenció el presidente de la Junta.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, calificó de «directamente intolerable e ilegal» que una discoteca prohíba la entrada de «maricones» y condenó este hecho.

Facua, la Asociación Española de Consumidores y diferentes entidades de todo el país también se sumaron a la causa.