Cómo sonreír te puede hacer más feliz

A todos nos pasa. Hay días en los que simplemente nos sentimos mal, como tristes, y necesitamos algo, cualquier cosa, a lo que agarrarnos para seguir adelante. Algo bien sencillo es ponerse una peli que nos haga sentir bien o comer chocolate, pero hay algo aún mejor que nos hará sentirnos felices por nosotros mismos (sin ayuda del chocolate), y es ¡sonreír!

Los seres humanos reaccionan casi instantáneamente a las expresiones faciales que vemos en otros. Se tarda sólo 30 milisegundos (milésimas de segundo) para que nuestro cerebro reconozca y responda a las expresiones emocionales de los demás, como sonreír o fruncir el ceño. La investigación demuestra que estas reacciones son inconscientes, lo que significa que ni siquiera son accesibles a la parte consciente del cerebro, sino que son respuestas biológicas innatas. Así que, cuando sonríes a alguien, él o ella realmente no puede evitar sonreírnos de vuelta.

Es más, diferentes estudios han demostrado que el acto de sonreír tiene un profundo impacto en nuestra experiencia emocional. Sonreír provoca una reducción de las hormonas del estrés, mejora y aumenta la producción de hormonas que mejoran el estado de ánimo.

Un hecho divertido que remarca además la edición americana del huffingtonpost.com; si sonreímos mientras experimentamos dolor, nuestros sentimientos de dolor pueden disminuir. Por lo tanto, además de ayudarnos en nuestro mal día o en nuestra tristeza, una sonrisa también nos ayuda a sobrellevar el dolor físico. Incluso forzando una "falsa"sonrisa (aunque no nos apetezca nada sonreír) se ha demostrado que ayuda a reducir el estrés y a dar lugar a sentimientos más positivos.

Y si podemos cambiar nuestro propio estado de ánimo a través de la sonrisa, podemos hacer lo mismo también en los que te rodean. La hipótesis de retroalimentación facial también se aplica a la interacción interpersonal, ya que, como hemos aprendido, los seres humanos reflejan naturalmente las expresiones faciales de los demás. Al ver sonreír a los demás, experimentamos cambios fisiológicos que mejoran nuestros propios sentimientos de felicidad.

Con el entendimiento de que la sonrisa hace que la gente se sienta más feliz, tenemos una poderosa herramienta para cambiar nuestro estado de ánimo, nuestra experiencia, y el mundo que nos rodea.

La guinda de este artículo es que, además, sonreír nos hace más sanos. Ya que sonreír se ha relacionado con la reducción de la presión arterial, con el sistema inmunológico, y puede incluso reducir el riesgo de enfermedades crónicas.