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Embajadores de marca en Marketing, nuestro Influencer en casa

La Razón
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Por Joaquín Danvila

Ha llegado el momento de valorar más aún a los trabajadores de las Compañías, y no es suficiente con hacerlo por el valor interno que aportan al negocio desde el punto de vista operativo, sino que en los últimos tiempos, ha cobrado especial relevancia el impacto externo que tienen cuando se identifican, propagan y transmiten los valores, productos y servicios de la empresa.

Mientras que la credibilidad de la publicidad tradicional sigue cayendo, los potenciales clientes, al igual que los potenciales empleados, dan cada día mayor credibilidad a estos embajadores de marca, ya que están bien informados, conocen la empresa, sus productos, sus servicios, sus valores...y por su componente humano son precisamente más creíbles y generan más confianza que las propias marcas.

Por eso es interesante contar con ellos como herramienta de marketing, pero no se confunda, un Embajador de marca no se compra ni se contrata, al contrario que ocurre con los influencers, que pueden contratarse para mostrarse fieles a la marca. Un Embajador de marca o un «Brand Ambassador», se gana, hay que trabajar por y para el empleado si queremos conseguir que se convierta en un auténtico Embajador de nuestra marca.

De ahí el especial interés de las empresas por convertir a sus trabajadores en Embajadores de marca, son creíbles en sus entornos, tienen un alcance con alto potencial y tienen la capacidad de posicionar positivamente a las marcas de una manera sencilla y natural.

Bienvenidos pues a un capítulo más de unión entre las áreas Comerciales y de Marketing junto a las de Recursos Humanos. Y es que esto del Marketing como esto la venta, va definitivamente, de personas.