Cargando...

Tenerife

¿Por qué no se puede esquiar en el Teide cuando nieva? Estas son las razones

El volcán del Teide es el pico más alto de España con sus 3.700 metros de altitud

Imagen de archivo del Teide nevado Pixabay

El Teide, con sus 3.718 metros de altitud, se erige como el pico más alto de España y uno de los símbolos más representativos de Tenerife. Situado en el corazón de la isla, fue declarado Parque Nacional en 1954 y, en 2007, obtuvo el reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Estos honores, sumados a sus impresionantes paisajes y su excepcionalidad geológica, atraen anualmente a cerca de tres millones de visitantes, convirtiéndolo en uno de los destinos turísticos más populares a nivel nacional y europeo.

Con una extensión de casi 19.000 hectáreas, el Parque Nacional ofrece una amplia variedad de actividades, como senderismo, observación de estrellas, exploración de su flora y fauna, e incluso la posibilidad de ascender a la cumbre del volcán, ya sea a través del teleférico o caminando, aunque de forma limitada. Sin embargo, precisamente debido a su estatus de espacio natural protegido, el Teide está sometido a estrictas normativas y restricciones que buscan preservar su entorno.

A principios de marzo, el Cabildo de Tenerife activó el Plan de Emergencia Insular debido al temporal que azotó la isla, cubriendo varios puntos de blanco. El Parque Nacional del Teide fue uno de los lugares donde la nieve llegó, un fenómeno no tan raro durante los inviernos de la isla. Ante este escenario, son muchos los turistas que se preguntan por qué no es posible esquiar en el punto más alto de la península cuando se encuentra cubierto de nieve.

¿Por qué no se puede esquiar?

La respuesta es sencilla: el Parque Nacional del Teide es un espacio natural protegido, por lo que está sujeto a múltiples restricciones en cuanto a las actividades que se pueden realizar, y entre ellas se encontrarían los deportes de invierno como el esquí. Estas limitaciones se implementan para evitar cualquier impacto negativo en el ecosistema.

Además, como señala el medio Diario de Avisos, las condiciones de la nieve en el Teide no suelen ser adecuadas para la práctica del esquí, ya que esta suele ser escasa e irregular. A esto hay que sumar que se trate de una zona afectada por fuertes vientos, y su característico terreno escarpado, lo que haría peligrosa la actividad para los esquiadores. El Parque Nacional del Teide tampoco cuenta con infraestructura adecuada, y cuando los temporales de nieve azotan la isla, es común el cierre preventivo de algunas carreteras y senderos, lo que dificulta el acceso al parque y hace aún menos viable la práctica de deportes invernales en el área.