Residencias
Más inspecciones y auditorías periódicas, prioridades de Ciudadanos para la futura Ley Residencial
La formación naranja presenta sus propuestas, que pasan también por fomentar el envejecimiento activo y las unidades de convivencia con servicios más especializados
Las personas mayores que viven en residencias son las que más están sufriendo las consecuencias sanitarias de esta pandemia que parece no tener fin aunque los datos de los últimos días y la cercana llegada de las vacunas invitan al optimismo, tanto en la mortalidad como en las circunstancias personales que tienen que vivir cada día, muchos de ellos aislados en sus habitaciones por tener síntomas o sin ellos por prevención, con las consecuencias para la movilidad que ello tiene, y con las visitas de familiares restringidas o limitadas en tiempo y periodicidad, lo que conlleva igualmente problemas en la salud mental sobre todo de los usuarios.
En Castilla y León, a través de la Consejería de Familia, se está trabajando en colaboración con los grupos parlamentarios en una nueva Ley residencial que mejore todas estas situaciones y, sobre todo, consiga que las residencias estén mejor preparadas y atendidas para evitar lo ocurrido con la covid en futuras pandemias o situaciones de emergencia similares.
Y Ciudadanos ha presentado este miércoles sus propuestas a esta normativa autonómica, que es uno de los compromisos adquiridos en el Pacto de Comunidad por la Recuperación de la covid, que firmaron todos los grupos políticos con representación en las Cortes excepto Vox y la Unión del Pueblo Leonés (UPL)
La procuradora “naranja”, María Teresa Gago, daba a conocer esta mañana las prioridades de su grupo para esta Ley, que ya han trasladado a la consejera Isabel Blanco, y que pasan principalmente por reforzar las inspecciones y por auditorías periódicas en los centros residenciales para que se pueda conocer en todo momento el estado de cada centro, que deberán orientar sus medidas hacia un modelo sociosanitario ordinario, así como por fomentar el envejecimiento activo de los residentes e impulsar las unidades de convivencia sin discriminación por grado de dependencia y con unos servicios más especializados. Todo ello con el objetivo de mejorar el estado del bienestar de los residentes y sobre la base de un sistema, el actual, con el que no están descontentos del todo “y que no es malo”, pero que se ha visto desbordado en esta crisis del coronavirus, y que consideran necesario apuntalar con algunas medidas más concretas.
Igualmente, Ciudadanos defiende la creación de un registro de pacientes así como adecuar los centros arquitectónicamente a las necesidades de los usuarios y que las residencias incluyan también un historial residencial en el sistema clínico de Medora.
En lo que respecta a los trabajadores, el Grupo Parlamentario de Cs apuesta por implementar planes de formación profesional para los trabajadores, mejorar la coordinación y profesionalización de los empleados del sector sociosaniario y poner blanco sobre negro en las ratios de técnicos y acerca de las labores que deberán llevar a cabo los profesionales en función del grado de dependencia de los usuarios.
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