Coronavirus

Bonaventura Clotet: «Con nuestro tratamiento podríamos contener el coronavirus»

“Cuando empezó esta epidemia en China, nosotros ya teníamos una vacuna que hemos producido y que es cien veces más potente de las habituales”

Bonaventura Clotet es uno de los grandes referentes internacionales en la lucha contra el sida. Ahora, también, se enfrenta al coronavirus coordinando varias investigaciones, una labor que ha encontrado eco en la campaña #yomecorono que lideran su hijo Marc Clotet y la actriz Natalia Sánchez. En la siguiente entrevista, este reconocido médico cuenta los avances en la lucha contra el virus.

- ¿En qué estado se encuentra el estudio clínico que está realizando?

- Le haré un resumen de nuestra investigación que es precursora en España. Cuando empezó esta epidemia en China, nosotros ya teníamos una vacuna que hemos producido y que es cien veces más potente de las habituales, es decir, cien veces más inmunogénica: provoca con mayor fuerza una reacción del sistema inmunitario. Es una vacuna que hicieron Jorge Carrillo y Julià Blanco, investigadores de mi laboratorio, y que ya estamos ensayando, no solo para el sida, sino también como vacuna preventiva de otros virus. Por esto, cuando vimos la llegada del virus, pensamos que podíamos contribuir al desarrollo de una vacuna contra el coronavirus. Nos pusimos en contacto con el grupo del supercomputador de Barcelona, BSC, con Alfonso Valencia y Víctor Guallar al frente, con los que ya habíamos trabajado en el desarrollo de esta vacuna nuestra, que sirve para desarrollar otras vacunas terapéuticas contra el cáncer. También pensamos que podíamos colaborar con el Centre de Recerca en Sanitat Animal (Cresa), de la UAB, y que lleva Joaquim Segalés y Júlia Vergara. Así creamos un consorcio de tres (Supercomputador, Cresa e IrsiCaixa) y gracias a Grifols estamos desarrollando la vacuna contra el coronavirus y también anticuerpos a partir de los cuales crear otros anticuerpos con los que bloquear la infección. Además estamos desarrollando nuevas moléculas y fármacos a la vez que identificamos nuevas dianas con las que inhibir el virus con tratamientos.

-¿Qué ha logrado este consorcio ahora?

-Desde hace semanas tenemos aislado al virus y estamos testando in vitro la eficacia de muchos fármacos que ya están disponibles. La semana que viene tendremos los primeros resultados y así podremos tener la prueba concepto de evidencia de que in vitro funciona. La investigación tiene dos patas, estoy hablando de la pata básica: vacuna preventiva del coronavirus, desarrollo de anticuerpos para bloquear al virus y la producción e identificación de nuevas sustancias activas contra el virus.

-¿Cuál es esa segunda pata?

-Por otro lado está la investigación clínica que es la que está realizando el doctor Oriol Mitjà. Es muy importante porque lo que persigue es demostrar la prueba concepto del testar y tratar. Es decir, hasta ahora no se ha testado a nadie porque ha habido una ausencia de previsión y no se disponía de tests suficientes para la gente. Creemos que todo el mundo, cuando empieza a tener síntomas mínimos, debería hacerse la prueba y tratarse de inmediato. Así se reduciría el número de virus que se eliminan. Es evidente que si tienes un fármaco que te baja la cantidad de virus que eliminas con la segregación, estás reduciendo significativamente la cantidad de virus que propagas a tu alrededor y, por tanto, la posibilidad de contagio a tu alrededor, Con este tratamiento inmediato y si además todos llevamos mascarilla, podríamos contener mucho mejor la epidemia.

-¿Cómo está ahora este estudio del doctor Mitjà?

-Lo está realizando con 3.000 personas y el resultado lo tendremos en las próximas semanas. Su estudio también servirá para saber si la prevención con la hidroxicloroquina evita la infección, lo cual sería muy bueno para trasladarlo al personal sanitario.

-¿Se puede establecer un calendario?

-Aparte de este estudio de Oriol Mitjà, hay otra línea de investigación que lleva el doctor Roger Paredes que será el líder en España con un estudio para el National Institute of Health y con otro para el Insight, que servirá para realizar un tratamiento muy precoz de la infección. Sobre los resultados, la semana que viene tendremos aquellos de la actividad in vitro de muchos fármacos que actualmente están disponibles. Podremos tener datos in vitro sobre el propio virus que hemos aislado. De esta manera veremos cómo estos fármacos inhiben la actividad citotóxica que tiene el virus. Con estos resultados de la prueba in vitro es lógico pensar que el fármaco podría actuar in vivo, aunque lo cierto es que no siempre lo que actúa in vitro lo hace in vivo. Sin embargo, lo que está claro es que si no actúa in vitro, in vivo no se podrá hacer nada. En momentos de urgencia, como es este caso, hay que hacer la investigación de una manera muy eficaz y aplicar el método científico para hacerlo bien. Por ejemplo, si encuentras una base científica correcta porque in vitro funciona, conoces los fármacos y estos tienen un perfil de seguridad bueno porque se han usado en otras enfermedades, entonces puedes aplicarlos y proporcionárselos al personal sanitario que está en riesgo y se infecta mucho.

-¿Hay precedentes de este tipo de investigación?

-Hay un fármaco que se usa contra el sida que se llama Truvada y que se usa en la terapia preexposición. A las personas que no están infectadas con el sida pero están en alto riesgo de infectarse, si lo toman bien, Truvada las protege en más de un 90 por ciento. En cambio, ese mismo fármaco si lo tomas cuando ya estás infectado no hace nada, no controla el virus y la enfermedad sigue. Es muy diferente evitar la infección y prevenir la entrada del virus que tener que tratar mucha cantidad de virus replicado. Eso es lo que podría estar pasando con la hidroxicloroquina, un fármaco que se está ensayando en el estudio de Oriol Mitjà y podría ser útil para prevenir, pero que también podría ser útil a los pocos días de la infección. En cambio, es probable que en etapas más avanzadas de la infección no haga nada. De todo estos estudios, mientras se realizan y se llevan a cabo, se tardará tres o cuatro meses en tener un análisis preliminar.

-¿Lo está haciendo bien la Administración?

-Para que todo esto funcione falta dinero. Lo que estamos haciendo no sería posible sin la farmacéutica Grifols, la obra social de la Caixa y la Generalitat de Cataluña que, desde hace más de 25 años, apoyan IrsiCaixa. Falta dinero y lo digo porque el Gobierno debería dar diez veces más presupuesto a la investigación en biomedicina. Después, ¿si se han hecho bien las cosas? La respuesta es obvia: No.

-¿En qué se ha fallado?

-Ha sido todo. Ha faltado ver que lo que venía nos podía afectar de igual manera que había afectado en China. Por tanto, deberíamos haber prevenido y protegido nuestro sistema sanitario, provisionarlo adecuadamente con todo lo que podía hacer faltar y, obviamente, provisionar con los medicamentos que hacían falta y con los reactivos y test que hacían falta para diagnosticar a la población. Se tendrían que haber tomado medidas de aislamiento más potentes, además de estudios de prevención… Honestamente buscar culpables ahora no nos lleva a ningún sitio. En África se dice que si se hubiera plantado un árbol se tendría sombra. Así que lo que hay que hacer es plantarlo ahora porque si no nos volveremos a quejar en un año. Ahora no hay que criticar porque para eso ya habrá tiempo y habrá que hacerlo, pero estamos en el momento de tomar medidas inmediatas máximas.

-¿Cuáles serían esas medidas?

-Madrid se tenía que haber cerrado mucho antes, igual que Barcelona y Cataluña. No se ha hecho, con lo que hagámoslo bien ahora. Tenemos un amplio abanico de epidemiólogos. No debería haber tendencias políticas ni de otro tipo. Hay que coger a la gente que vale con independencia de su posicionamiento personal, basándose en su valor personal para hacerles caso. Una persona que lo ha acertado desde el primer día es Oriol Mitjà y, en cambio, no forma parte del comité del Gobierno de España. Es una pena porque todos sumamos.

-Oriol Mitjà hablaba esta semana de la creación de un dni vírico, ¿qué le parece?

-Cuando sepamos que todos los que han pasado la infección tienen una inmunidad persistente que lo protege de nuevas infecciones, estaría bien que, para posibilitar la libre circulación de la gente, todo aquel que estuviera protegido tuviera un carné. También estaría bien que existiera una aplicación en los móviles que permitiera saber qué característica cuando tus actividades afectan a un entorno muy poblado de gente. Todo esto es útil mientras esperamos una vacuna o que haya un tratamiento preventivo que funcione.