Coronavirus

Residencias de ancianos: la Generalitat o el silencio por respuesta ante el coronavirus

Dos centros recurren a laboratorios privados al no recibir respuesta del Govern cuando le han pedido ayuda

Efectivos de la UME desinfectan residencias en Sant Boi (Barcelona)
Efectivos del UME trabajando en la desinfeccion de la residencia Los Sauces, de Sant Boi del Llobregat (Barcelona). EFE/Alejandro GarcíaAlejandro GarcíaAgencia EFE

Las residencias de ancianos de Barcelona están conociendo estos días el colapso. Son pocos medios ante las muchas necesidades que tienen por culpa del coronavirus. Según ha podido comprobar este diario, dos de ellas han tenido que pagar de su bolsillo las pruebas, tanto como las que se han hecho los residentes como las del personal de la casa, para poder saber si alguno de ellos está infectado con el COVID-19. Todo esto al no poder tener respuesta de la Generalitat pese a las reiteradas peticiones de ayuda.

Eso es lo que ha ocurrido estos últimos días, por ejemplo, en la residencia asistida para gente mayor Casa d’Asil de Sant Andreu de Palomar, en Barcelona, gestionada por la fundación de mismo nombre. Ellos mismos han tenido que sufragar los gastos de los test. La situación es especialmente grave porque han fallecido 45 ancianos en la citada residencia que en la actualidad cuenta con 151 plazas, de las que 109 son concertadas con la Generalitat y 42 son privadas. La Fundació Casa Asil de Sant Andreu de Palomar es la que ha financiado las pruebas de todos los internos.

El pasado lunes, los familiares de los residentes del Centre Residencial Putxet recibían un correo electrónico en el que se anunciaba la delicada situación que se estaba viviendo en él. En él se indicaba que el día antes “detectamos a varios residentes con febrícula muy débil pero ante la sospecha los confinamos a todos, informamos a los respectivos familiares y ante la falta de ayuda de la administración, pedimos a un laboratorio privado la realización de los respectivos test”. En este correo, al que ha podido tener acceso este periódico, se anunciaba que las pruebas habían determinado que dos de los residentes habían dado positivo por coronavirus. Por ese motivo, los trabajadores de este centro residencial serían también analizados, otra vez, por un laboratorio privado.

El hecho de que la Generalitat no haya acudido a la llamada de socorro de esta institución y que el silencio fuera la única respuesta, ha creado incertidumbre y malestar entre los familiares de quienes conviven en el Centre Residencial Putxet. Laura Mas, hija de una de las residentes, explicó a este medio que “hemos estado viviendo esta situación con mucha angustia e impotencia durante estos días. Sabemos que en la residencia están desbordadísimos, pero necesitamos una respuesta”.

Esa respuesta llegó finalmente este jueves, otra vez mediante correo electrónico. Los responsables del centro afirman con contundencia que, “después de tantas semanas, llamadas diarias y monitorización de la residencia, nadie de la administración nos ha ayudado ni con material ni con logística”. Pese a todo, tranquilizan a los familiares diciéndoles que la situación es “estable y las familias han sido informadas de inmediato de los residentes que han dado positivo”.