Los profesores catalanes plantan al Govern y agudizan la crisis con Educación

El Govern sigue sin encontrar cómo detener el malestar de los profesores. Por muchas propuestas que haya planteado en las últimas semanas, ninguna da con la tecla que permita rebajar la tensión con los docentes de la escuela pública y concertada, que se han echado a la calle (cinco días de huelga han hecho desde mediados de marzo) durante las últimas semanas y, además, los sindicatos han plantado este jueves a la conselleria de Educación en la reunión sectorial que había prevista. Es decir, la crisis se agudiza y el conflicto, con gran calado político, parece enquistarse.

Los sindicatos y algunos partidos políticos (como la CUP) vienen exigiendo desde hace semanas la dimisión del actual conseller, Josep González Cambray: de hecho, ayer elevaron el tono y organizaron un escrache en la sede de Esquerra, una imagen significativa porque el sector docente tradicionalmente había sido bastante afín a ERC. Los Mossos d’Esquadra tuvieron que intervenir y blindar la sala de máquinas de los republicanos.

El departamento de Educación ha ofrecido en las últimas horas una reducción de una hora lectiva para los maestros de infantil y primaria a partir de 2023, y para los profesores de ESO a partir de 2024 (medidas con un coste de 170 millones de euros), pero ninguna ha satisfecho a los sindicatos. Y no solo por el contenido, sino también por las formas, ya que consideran que es una maniobra de Cambray para limpiar su imagen ante la opinión pública y proyectar proactividad.

En este sentido, en un comunicado, los sindicatos han advertido de que no iban a contestar a esta propuesta de la Generalitat porque “no se ajusta a tiempo y forma que habilite a una negociación real”: “Quiere manipular a la opinión pública a través de los medios de comunicación diciendo que ha enviado una propuesta previa”, cuando la propuesta “llega a las 21.00 horas, con solo 12 horas de antelación”, han señalado. Los sindicatos han afirmado que estudiarán “futuras propuestas del departamento siempre y cuando den pie a una negociación real y no a buscar golpes de efectos mediáticos”, en alusión a esta propuesta.

Además, la conselleria ofrecía para la reunión otras medidas ya anunciadas públicamente, como la sustitución de tercios de jornada por medias jornadas, la reducción de ratios, la estabilización de personal o el retorno al carácter lectivo de las dos horas de reducción del personal mayor de 55 años, para un total de 494 millones de euros de inversión hasta 2025. Sin embargo, los sindicatos critican que no hay un calendario establecido para que estas medidas se pongan en marcha: de hecho, denuncian que ninguna empezaría el año que viene cuando la exigencia de los sindicatos es que se implementen ya en el 2022-2023.

Lo cierto es que entre las propuestas del conseller, están algunas de las que exigían los sindicatos: entre otras cosas, reclaman elevar el gasto en educación al 6% del PIB, revertir recortes (recuperar el horario lectivo previo a los recortes, reducir las ratios, incrementar el personal de atención directa, recuperar el poder adquisitivo perdido), retirar el nuevo calendario escolar o eliminar el nuevo currículum (ya retirado por el Govern para rebajar los ánimos).