Día del libro y la rosa

Sant Jordi recupera las Ramblas en una edición con más estands que nunca

La celebración de este año cae en día laborable por primera vez desde la pandemia

Ambiente en Sant Jordi,Barcelona .
Ambiente en Sant Jordi,Barcelona .Shooting

Sant Jordi se celebra este año en día laborable por primera vez desde la pandemia. Este es uno de los retos a los que se enfrenta el sector, que, tras una edición 2023 de récord, pronostica una diada igual de participativa, debido al aumento de stands.

En Barcelona, este año la celebración vuelve a batir récords: contará con 435 estands, un metraje de 3.355 metros y 214 mesas dedicadas a la firma de autores. De los estands, 336 serán de venta de libros, más un centenar que estarán ubicadas delante de las librerías.

Se ha apostado por la descentralización de la fiesta, y, por primera vez, Sant Jordi estará repartido en siete distritos de la ciudad condal. El presidente del Gremi de Llibreters, Èric del Arco, ha asegurado este lunes en rueda de prensa que este año "en coincidir con un día laboral, será más local y más repartida".

Pero una de las grandes novedades del Sant Jordi de este año es que volverá a su sitio de origen tras 4 años: las Ramblas. Después de los atentados del 2017 y de la pandemia, los estands volverán a ocupar la totalidad de las Ramblas, con un total de 94.

Otra novedad será la metodología para anunciar la lista de los libros más vendidos de la jornada. Por primera vez, el Gremi de Llibreters no dará el listado de los más vendidos, sino sobre tendencias: "En el mismo día no podemos decir cuál es el más vendido, ya que todavía no han cerrado los stands. Así que diremos los cinco que más se están vendiendo, junto con las tendencias de los 4 días anteriores, que también se darán por la noche". El ránking se hará esperar hasta el 29 de abril, cuando se hayan procesado los datos de las ventas en las librerías y los stands.

Uno de los cambios polémicos de este año, anunciado hace un par de meses, es el copago de los estands, que supone el pago de 80 euros por cada seis metros cuadrados. Sobre ello, Del Arco ha defendido que era necesario, ya que el modelo anterior "se ha vuelto inviable", pero se ha mostrado dispuesto a empezar una reflexión después del día. Ha recordado que una jornada que reúne a más de un millón de personas en Barcelona requiere de una estructura para poder "trabajar bien" y garantizar la seguridad.

Por su parte, la consellera de Cultura, Natalia Garriga, ha calificado a Sant Jordi como "la mejor fiesta del mundo" y ha puesto en valor el Pla Nacional del Llibre i la Lectura del Govern. Ha recordado que el pasado año se vendieron unos 60.000 títulos diferentes, casi la mitad en catalán, y que se consiguió una gran diversidad temática. Sobre la posibilidad de que la Generalitat asumiera todo el gasto de la fiesta, la consellera ha recordado que cubre el 85 por ciento del total.