Exploración Espacial

Cuenta atrás para el encendido del cohete más poderoso de la historia

Según ha anunciado Elon Musk en su cuenta de Twitter, el lanzamiento que estaba previsto para el lunes 17 de abril se retrasará hasta “finales de la tercera semana”

La nave espacial Starship reposa sobre su propulsor principal en Boca Chica
Starship reposa sobre el Falcon Super Heavy en Boca ChicaSpaceXSpaceX

Estamos más cerca que nunca de ver en acción a la Starship, la nave espacial más potente hasta la fecha. Tras superar las pruebas WDR (Wet Dress Rehersal) a finales de enero, que consistían en ejecutar todos los pasos anteriores al encendido de los motores, el siguiente paso es encenderlos y realizar las primeras pruebas de vuelo orbital con la gigantesca nave. Como anunció el propio Elon Musk en su cuenta de Twitter este domingo 9 de abril, la nave se encuentra ensamblada en Starbase, la base espacial que la empresa SpaceX tiene en Boca Chica, Texas.

Qué se espera de la misión

La Starship y todos sus componentes prometen ser reutilizables. Una vez se enciendan los 33 motores raptor dentro del Falcon Super Heavy, más de 74000 newtons de fuerza propulsarán la nave hacia el espacio. Apenas 3 minutos después, cuando la nave haya superado los 60 kilómetros de altura, el propulsor principal se despegará de la nave y comenzará su descenso controlado hacia la base para poder ser reutilizado en un futuro. Mientras esto sucede, la Starship continuará acelerando hasta alcanzar la velocidad suficiente como para mantenerse en órbita. Si hasta aquí todo es un éxito, la Starship descenderá y debería amerizar a unos 100 kilómetros de Kauai, en el Pacífico.

La idea final es que estas naves no tengan que volver a despegar, si no que tengan la capacidad de repostar en el espacio mediante vehículos cisterna. Estas “gasolineras” espaciales son otras naves Starship que no poseen ventanas y que están optimizadas para llevar hasta 100 toneladas de combustible (oxígeno y metano) para poder realizar las misiones a Marte. SpaceX también pretende que estas naves cisterna sean reutilizables para minimizar los costes de los lanzamientos.

A falta de la aprobación de la FAA

Lo único que quedaba para realizar la prueba de vuelo era que fuese aprobado por la FAA (la administración federal de aviación por sus siglas en inglés) Y, aunque SpaceX anunció que la prueba se podría realizar tan pronto como el lunes día 17 de abril, parece que ha tenido que retrasarse unos días hasta finales de la tercera semana (entre el 18 y el 23). Mientras la nave reposa encima de su primera etapa, el cohete Falcon Super Heavy, van a seguir con los ensayos de lanzamiento y ultimando los detalles para que el despegue sea un éxito.

No es el primer retraso que sufre SpaceX en su programa espacial, ya que estas pruebas se esperaban para 2022, aunque esta vez parece que sí que se encuentran con todos los preparativos a punto para el lanzamiento. Al tratarse de la primera prueba, es posible que el resultado sea una espectacular bola de fuego, como ya ha sucedido en ocasiones anteriores con otras misiones de SpaceX. La mayoría de estos fallos han sido consecuencia del ambicioso plan de reciclar la mayoría de los componentes de los cohetes, pero de conseguir una alta tasa de éxito en los aterrizajes, los costes por lanzamiento se reducirían significativamente.

Marte en el punto de mira (aunque lejos)

El magnate estadounidense sigue pensando que en 2026 la humanidad habrá pisado Marte y está poniendo todo su empeño en conseguirlo. Para ello su empresa SpaceX esbozó lo que sería el programa Starship hace poco más de 15 años. Esta misión, que fue anunciada por primera vez en 2016, se ha ido materializando con el paso del tiempo. Para ello, la empresa ha tenido que adaptarse a una enorme cantidad de cambios, desde el número de motores de cohete necesarios para levantar la estructura, hasta el material de la misma nave.

El resultado final es una nave colosal con capacidad de llevar a una tripulación a Marte. Cuando se encuentra encima del Falcon Super Heavy, el conjunto es un cilindro de 9 metros de diámetro y 119 metros de altura, de los cuales 50 pertenecen a la nave en sí y 69 al propulsor. En total, se espera que la nave pueda llevar hasta 100 personas y 100 toneladas de materiales hasta el planeta rojo para poder establecer una base permanente y así, colonizar otro mundo. Lamentablemente quedan únicamente 3 años hasta 2026, por lo que parece una fecha demasiado cercana como para que pueda materializarse una misión, especialmente si se tienen en cuenta los retrasos que este tipo de proyectos inevitablemente sufren.

QUE NO TE LA CUELEN:

  • Aunque Marte todavía parezca lejano, ya existen empresas que tratan de imaginarse cómo será el turismo espacial en el planeta rojo. Es posible que merezcan la pena los meses de viaje y los millones de dólares del billete para poder admirar parajes tan espectaculares como Olympus Mons, el volcán más alto del Sistema Solar; Valles Marineris, un cañón que se extiende durante 3000 km; o por poder hacerse un selfie con las sondas y robots que se encuentran en su superficie.

REFERENCIAS (MLA):