Espacio

Se revelan las primeras imágenes de Euclid, y son estas estrellas huérfanas a 240 millones de años luz

El telescopio espacial Euclid, que costó 1.400 millones de dólares, nos envía al fin sus primeras imágenes

Esta imagen, capturada por el satélite Euclid, muestra el cúmulo de galaxias de Perseo bañado en una suave luz azul emanada de las estrellas huérfanas. Estas estrellas huérfanas están dispersas por todo el cúmulo, extendiéndose hasta 2 millones de años luz desde su centro. Las galaxias del cúmulo destacan como formas elípticas luminosas contra la oscura extensión del espacio.
Esta imagen, capturada por el satélite Euclid, muestra el cúmulo de galaxias de Perseo bañado en una suave luz azul emanada de las estrellas huérfanas. Estas estrellas huérfanas están dispersas por todo el cúmulo, extendiéndose hasta 2 millones de años luz desde su centro. Las galaxias del cúmulo destacan como formas elípticas luminosas contra la oscura extensión del espacio. ESA/Euclid/Euclid Consortium/NASA, procesamiento de imágenes por M. Montes (IAC) y J.-C. Cuillandre (CEA Paris-Saclay)Eurekalert

Al fin hemos recibido las primeras imágenes científicas del telescopio espacial Euclid y han revelado más de 1.500 millones de estrellas huérfanas esparcidas por todo el cúmulo de galaxias de Perseo. Resultados que ha acumulado en menos de un año, porque lo lanzamos al espacio en julio de 2023. Sus primeras imágenes son espectaculares, unas cuatro veces más nítidas que las que podemos obtener con la mayoría de los telescopios terrestres y, por si fuera poco, cubren grandes áreas del cielo nocturno con una profundidad sin precedentes. Es en este contexto en el que, Euclid, ha podido confirmar cómo la gravedad de la Vía Láctea desintegra cúmulos de estrellas.

Pero para poner algo de contexto, hablemos primero de Euclid: un telescopio de 4,7 metros de largo y 1,2 de diámetro, lo cual puede parecer poco al lado del titánico James Webb, pero no tiene sentido compararlos, porque sus propósitos son diferentes. Euclid está preparado para captar luz que le llegue en el espectro visible, esto es, los colores que nosotros podemos ver, pero también en infrarrojo, que es un tipo de luz menos energética. De hecho, la luz infrarroja es lo que nos permite ver en la oscuridad con cámaras térmicas, porque todo brilla, solo que con tan poca energía que nuestro ojo no puede captarlo.

Euclid y Roman

Se trata de una misión de la Agencia Espacial Europea con colaboraciones de la NASA y que, aunque despegó el año pasado, formará dúo con un segundo telescopio que no lanzaremos hasta 2027 y que ha sido bautizado como Roman, que se centrará específicamente en este segundo tipo de luz y, mientras que Euclid estudiará cuestiones cosmológicas (como la expansión o la materia oscura), Roman también extenderá sus cometidos a la astrofísica, investigando exoplanetas y otros objetos fuera de nuestro sistema solar.

Cada uno de ellos cartografiará el firmamento como nunca lo hemos hecho, digitalizando más de mil millones de galaxias durante varios años (6 en el caso de Euclid). El mapa tridimensional que obtendrán será superponible, para que las fortalezas de uno cubran las debilidades del otro telescopio y, a partir de esta información, puedan sacar conclusiones sobre cómo parecen distribuirse las estrellas y las galaxias y la velocidad a la que se separan. Lo cual nos ayudará a comprender, respectivamente, la naturaleza de la materia y la energía oscuras, o, en resumen: el universo oscuro.

El cúmulo de Perseo

La principal noticia asociada a las muy esperadas imágenes de Euclid tiene que ver con estrellas huérfanas, como hemos dicho, que no son otra cosa que soles dispersos que no pertenecen a ninguna galaxia específica. Estas estrellas huérfanas, curiosamente son de un color azulado y se agrupan en cúmulos. En concreto, ha estado analizando más de 1.500 millones de estas estrellas huérfanas en el cúmulo de Perseo, a 240 millones de años luz de nosotros, unos dos mil doscientos setenta cuatrillones quinientos setenta y siete mil cien billones de kilómetros.

A partir de la información recogida, los expertos han podido deducir que, las estrellas huérfanas observadas, provienen de pequeñas galaxias que han sido desintegradas por la gravedad del cúmulo de otras galaxias en el que se encuentran (arrancando las estrellas más periféricas de su galaxia original, por decirlo así). Además, por lo que han podido observar, estas estrellas orbitan alrededor de un punto entre las dos galaxias más luminosas del cúmulo. Tal vez como consecuencia de una reciente fusión del cúmulo de galaxias de Perseo con otro.

Lo que falta

Euclid tiene una capacidad de trabajo asombrosa. Para que nos hagamos una idea, es capaz de observar 11 millones de objetos astronómicos en tan solo un día. Sin embargo, cuando una sus fueras al Roman, sus aportaciones serán incluso más sorprendentes. Juntos permitirán poner a prueba si la expansión del universo se debe a la materia oscura o a una propiedad de la gravedad que todavía no comprendemos. Por ejemplo, mientras que Euclid observará un fragmento del universo 20 veces más grande que el de Roman, este segundo podrá hacerlo con muchísimo más detalle.

En el espacio, ver más lejos significa ver más atrás en el tiempo porque la luz tarda en llegar a nuestros ojos y, por veloz que sea a sus 300.000 kilómetros por segundo, tiene que cubrir distancias demenciales para ir de las galaxias más lejanas a nuestros ojos. Por ese motivo, el mayor nivel de detalle de Roman significa que podrá observar cómo era el universo cuando tan solo tenía 2 mil millones de años de antigüedad mientras que Euclid ofrece una visión mil millones de años más reciente. De hecho, ya está ofreciendo imágenes de los primeros 1.000 millones de años del universo. ¿Qué podremos cuando sumen sus fuerzas en 2028?

QUE NO TE LA CUELEN:

  • Hace un año ya anunciábamos que Euclid tendría una vida muy interesante al margen de su hermano pequeño y que, aunque fueran a trabajar juntos, ambos proporcionarían información tremendamente interesante sobre el cosmos de manera autónoma. Palabras que se han empezado a cumplir con esta noticia y que, sin duda, se seguirán confirmando hasta que Roman esté operativo e, incluso, después de eso.

REFERENCIAS (MLA):

  • “Euclid: Early Release Observations — The intracluster light and intracluster globular clusters of the Perseus cluster” (2024) [[LINK:EXTERNO|||https://www.cosmos.esa.int/web/euclid/ero-public-release">]].
  • “Euclid: Early Release Observations – Deep anatomy of nearby galaxies” Astronomy and Astrophysics (2024)