Medio Ambiente

Un estudio alerta del problema de colmatación de L’Albufera

El cierre de las compuertas en la época de lluvia incide negativamente

Paraje de la Albufera de Valencia.
Paraje de la Albufera de Valencia.larazon

Un estudio elaborado por Maite Sebastián y Javier Estornell, expertos en gestión ambiental y teledetección del campus de Gandia de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), advierte del problema de colmatacion que presenta la laguna de la Albufera de València.

Los resultados obtenidos en el estudio permiten identificar las áreas de la laguna con los valores más anómalos de turbidez, proporcionando información relevante para la gestión de los recursos hídricos, según un comunicado de la UPV.

Maite Sebastiá y Javier Estornell han colaborado con investigadores de la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad Autónoma de Baja California (México) en el estudio que analiza el patrón de turbidez mensual de la laguna de la Albufera.

El proyecto comenzó durante la estancia postdoctoral de Maite Sebastiá en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), en el grupo Popeye, especialista en oceanografía costera y teledetección.

Maite Sebastiá es doctora en Ciencias Ambientales, especialista en seguimiento de ecosistemas costeros. El objetivo de la estancia fue aplicar el seguimiento por teledetección a la Albufera de Valencia, una laguna costera que presenta un importante problema de eutrofización.

La eutrofización es debida al aporte de nutrientes, principalmente nitrato y fósforo, que puede producir un desequilibrio en el sistema y cambiar la composición del fitoplancton.

En la Albufera, este problema se remonta a la década de los sesenta. A partir de esta fecha los efectos de la acción humana comenzaron a hacerse evidentes con la progresiva degradación del espacio y de su biodiversidad, pasando de un estado claro a un estado estable turbio que se consolidó a principios de los setenta, añade la nota.

Pero en los últimos años, Paloma Mateache, directora conservadora del Parque Natural de la Albufera, y María Sahuquillo, técnica al cargo del programa de seguimiento de calidad de la Conselleria de Emergencia Climática, han mostrado su preocupación por la gran cantidad de sedimentos aportados que están produciendo un problema de colmatación de la laguna.

“Los sensores remotos pueden dar información acerca de la turbidez, que a su vez nos indicaría las zonas con más probabilidades de acumulación de sedimentos”, según explican los responsables científicos del proyecto.

Con el propósito de realizar un seguimiento de la laguna, el equipo de investigación empleó imágenes satelitales de Sentinel- 2 de la Agencia Espacial Europea comparando con datos in situ del programa de monitoreo de la Subdivisión General de Medio Ambiente de la Generalitat.

Según Maite Sebastiá, “los periodos de alta turbidez de la laguna están relacionados con las etapas en las que las compuertas están cerradas, permaneciendo el agua en la laguna por un largo periodo de tiempo”.

Sin embargo, las precipitaciones y el viento también influyen en la distribución espacial de la turbidez. “Durante las tormentas, el fitoplancton y los sedimentos se descargan al mar, si las compuertas permanecen abiertas”.

La temporada de cosecha del arroz, cuando se abren las compuertas, coincide fortuitamente con el comienzo del período lluvioso. El cierre de compuertas durante las lluvias podría repercutir de forma negativa a la laguna aumentando la obstrucción generada por los sólidos no descargados, así como a las playas próximas a las aguas costeras, al disminuir la recepción de sólidos necesarios para nutrir los ecosistemas. Esto evidencia la importancia del manejo consciente de las compuertas, según el estudio.