El Puerto de Valencia se ve obligado a cortar la entrada de contenedores por la congestión

El puerto de València presenta un nivel de congestión “muy alto” debido a la huelga de transporte, ya que solo están trabajando un 30 % de los camiones que habitualmente operan en este recinto portuario, por lo que la Autoridad Portuaria ha decidido “cortar” la entrada de los contenedores de exportación.

Según ha informado este lunes el subdirector general de la Autoridad Portuaria de Valencia, Néstor Martínez, el puerto se encuentra en una situación intermedia, “con un nivel de congestión muy alto y hemos tomado la medida de contingencia de cortar la entrada de contenedores de exportación hasta que hagamos el hueco suficiente sacando los contenedores de importación, para recuperar la normalidad”.

Dicha normalidad, ha precisado en declaraciones a los periodistas, no se alcanzará hasta que no se recupere entre el 80 y el 90 % de la actividad de los transportistas, que posibilite “hacer hueco en las terminales, ya que si se continúa metiendo más contenedores de los que se sacan con los camiones lo vamos a tener difícil”.

Martínez ha lanzado un mensaje de tranquilidad y ha asegurado que “las mercancías llegarán a su destino aunque sea tarde” y el puerto tiene “enchufes suficientes” para los productos perecederos, que llegan en contenedores frigoríficos, por lo que ha garantizado que “se mantendrán en condiciones para que no se produzca una pérdida de la mercancía”.

La huelga de transporte, que cumple 15 días, “de momento está afectando en la medida en que se está produciendo una congestión importante en el puerto porque si no salen contenedores se van acumulando”, ha reiterado.

“Afortunadamente el mal tiempo ha hecho que tuviéramos que cerrar los puertos porque las condiciones meteorológicas no daban la seguridad para las maniobras de los barcos y eso ha evitado que se hayan descargado los barcos que están esperando fuera del puerto”, ha indicado Martínez.

“Esta situación ha evitado un colapso que podía haberse producido si las condiciones lo hubieran permitido”, ha advertido.

“En estos momentos estamos en una situación intermedia, con un nivel de congestión muy alto”, ha añadido, por lo que la Autoridad Portuaria ha adoptado la medida de contingencia de cortar la entrada de contenedores de exportación hasta hacer el hueco suficiente en las terminales, sacando los contenedores de importación.

Según ha informado, sobre las 08.00 horas de ayer se reabrió el puerto y empezaron a entrar barcos que comenzaron a realizar las operaciones de carga y descarga sobre las 14.00 horas.

Esta mañana había 19 buques portacontenedores atracados en el puerto haciendo operaciones de carga y descarga, y en el fondeadero otros 21 barcos guardan cola a la espera de un atraque libre.

Para Martínez la “normalidad” en la actividad portuaria llegará en el momento en el que se desconvoque la huelga, ya que ahora está trabajando el 30 % de los camiones que lo hacen habitualmente.

El paro, señala, está siendo secundado por los transportistas autónomos del puerto y empresas que “tienen un miedo escénico a retomar la actividad”.

“Hasta que no se recupere entre el 80 y el 90 % de la actividad de los transportistas la posibilidad de hacer hueco en las terminales va a ser más difícil y no podremos estimar cuándo podremos estar en condiciones de volver a la normalidad”, añade.

Martínez ha señalado por último que, a medio o largo plazo, hasta que se disponga de la nueva terminal norte, es necesario adecuar terrenos fuera del puerto para el almacén de contenedores y aligerar las terminales, ante situaciones como la vivida por esta huelga.

Contundencia contra el vandalismo

Por su parte, la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) ha considerado hoy que el Gobierno central “debe y debería haber asegurado” el “derecho a trabajar” de todos los transportistas que lo deseen y “ser contundente con las acciones vandálicas” y considera que la “reforma que suprimió las penas de cárcel para quien coaccionara a otro para hacer una huelga, fue un error”.

La Junta Directiva de AVE ha celebrado este lunes una reunión en la que, entre otros temas, ha abordado la futura planta de baterías que Volkswagen instalará en Sagunto, el paro de transportistas y la trigésimo séptima edición de la Copa del América, para la que en principio se ha descartado que se celebre en Valencia, según ha indicado la organización en un comunicado.

En relación con el paro de transportistas, desde AVE han indicado que después de dos años de pandemia “y en un contexto de aumento constante de la inflación, de los costes energéticos y de las materias primas, España no puede permitirse ni un día más de paro de los transportistas, porque amenaza la recuperación económica y del empleo”.

Tras añadir que constituye “un serio riesgo de desabastecimiento tras más de dos semanas de protestas, AVE indica que los indicadores económicos que vienen “son muy negativos y la situación va a empeorar”.

“La Junta Directiva de AVE es consciente de que, si bien algunas de las reivindicaciones planteadas por los transportistas deben ser atendidas, bajo ningún concepto puede paralizarse un país y, menos aún, de forma violenta”.

El Gobierno de Espana, afirma AVE, “debe y debería haber asegurado el derecho a trabajar de todos aquellos transportistas que lo deseen, como hicieron desde el principio los países de nuestro entorno, y ser contundente con las acciones vandálicas que, lamentablemente, se están produciendo aún a día de hoy”.

“Consideramos que la reforma que suprimió las penas de cárcel para quien coaccionara a otro para hacer una huelga, fue un error”, señala la entidad en el comunicado.

Además, añade, el Gobierno “no puede ponerse de perfil, sino que debe negociar con los transportistas y adoptar medidas de carácter urgente e inmediatas orientadas a que el paro no siga adelante y se garantice la cadena de suministro, de manera que las empresas puedan atender a sus clientes con normalidad”.

Respecto a la planta de Volkswagen, se ha “congratulado” del anuncio de la elección de Sagunto como sede de su futura fábrica de baterías para vehículos eléctricos, que genera u a inversión cercana a 7.000 millones de euros y 3.000 empleos.

Por otra parte, AVE “lamenta profundamente” que el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat “no se hayan implicado lo suficiente” para conseguir que se celebre en Valencia la trigésimo séptima edición de la Copa del América, “pese al apoyo mostrado por la sociedad civil en general y el mundo empresarial en particular”.

“Si, como se ha anunciado, se confirma que València queda descartada como sede de la próxima America’s Cup, será una enorme pérdida de oportunidad para la Comunitat Valenciana en su conjunto”, indican desde la entidad empresarial.

“Tenemos constancia de que algún proyecto financiero de envergadura estaba barajando València y finalmente se irá a Málaga, como sucedió en su día con otros proyectos de telecomunicaciones en detrimento de Alicante”, señala.

Según AVE, “como sociedad civil, debemos dar un paso al frente y trabajar para atraer estos proyectos a la Comunitat Valenciana y exigir a nuestros gobernantes que se alineen con los intereses generales de la Comunitat Valenciana y no con los suyos propios y particulares”.