Dana
Aldaia (Valencia) establece medidas ante inundaciones en la concesión de nuevas licencias
Tras la dana, el número de solicitudes de cambio de uso de local a vivienda ha aumentado por la falta de oferta de viviendas y la disminución de la actividad comercial
El Ayuntamiento de Aldaia (Valencia) ha establecido una serie de criterios ante posibles inundaciones para disminuir la vulnerabilidad de la seguridad de las personas, mejorar la autoprotección y rebajar las pérdidas materiales, que se seguirán para la concesión de nuevas licencias.
Tras la dana del pasado 29 de octubre, el número de solicitudes de cambio de uso de local a vivienda en Aldaia -uno de los municipios más afectados por las inundaciones- está aumentando consecuencia de, por un lado, la falta de oferta de vivienda y, por otro, la disminución de la actividad comercial en los locales de planta baja, según señala la resolución de alcaldía.
La nueva instrucción municipal tienen como objeto el establecimiento de medidas que disminuyan la vulnerabilidad de la seguridad de las personas, mejoren la autoprotección y mermen las pérdidas materiales.
En cuanto a su ámbito de aplicación, será todo suelo afectado por la huella de inundación de la cartografía de la dana publicada en el visor cartográfico de la Generalitat Valenciana, tanto para edificación existente como para obra nueva.
"En el caso de superposición de riesgos de inundación por diferentes cartografías, las normativas serán complementarias, tomando la más restrictiva de las aplicables", añade.
Garantizar el acceso a plantas superiores
Como criterios generales en la adecuación de las edificaciones, que serán de obligado cumplimiento, establece que dispongan de acceso a plantas superiores a través de escalera desde el interior del inmueble.
"Si esto no fuera posible se dispondrá de acceso en 'zona seca'", localizada a 2,2 metros de altura, en patios o dentro de la vivienda, mediante un forjado elevado con capacidad portante suficiente para el número de ocupantes de la vivienda, que como mínimo será de dos.
Añade que, en caso de situarse dentro de la vivienda, tendrá que ser accesible a través de alguna de las fachadas del edificio para asegurar una ruta de evacuación segura. Si ello es inviable las propuestas alternativas deberán ser consensuadas por los servicios técnicos municipales, precisa la resolución municipal.
En cuanto a las instalaciones de la vivienda o del local, como cuadros eléctricos, calderas o telecomunicaciones, se situarán a 70 centímetros por encima de la cota del forjado de planta baja y se tendrá que realizar la instalación de alumbrado de emergencia en las zonas próximas al acceso a plantas superiores o 'zona seca'.
Balsas y chalecos
Indica asimismo la tenencia de dispositivos de flotación (tipo balsa, chaleco salvavidas...) que permitan, en condiciones extremas y de emergencia, mantener una persona a flote en el agua.
Como criterios adicionales, se recomienda la redacción de un plan de autoprotección, así como la implementación de medidas para resistir la entrada de agua al edificio, como sellar las paredes exteriores con recubrimientos impermeables; colocar barreras contra inundaciones en puertas y ventanas e instalar carpinterías exteriores estancas.
Establece asimismo medidas para "tolerar la inundación" adaptando el interior del edificio, como la instalación de un zócalo o revestir las paredes con materiales resistentes al agua; instalar carpinterías resistentes en la corrosión; utilizar materiales resistentes a las inundaciones en particiones interiores como fábricas de baldosa cerámica en lugar de tabiquería seca de cartón-yeso y la instalación de diferencial independiente para el circuito de alumbrado.
El promotor, concluye, tendrá que subscribir una declaración responsable sobre el riesgo de inundación existente en la cual exprese claramente que conoce y asume el riesgo existente y las medidas de protección civil aplicables, inscrita en el registro de la propiedad.