El bocadillo favorito por los valencianos para el "esmorzaret"

La carne de caballo se ha puesto de moda a través de los almuerzos. Los populares «esmorzars» ganan adeptos día a día entre los valencianos y entre quienes se apuntan a tomarse un receso en el trabajo a eso de las 10 de la mañana para degustar un buen bocata con todos los aderezos, siguiendo una sana costumbre muy valenciana.

Así lo ha entendido Mi Cub, en el Mercado de Colón, al protagonizar una puesta en escena culinaria con el potro como protagonista ante un reducido número de comensales/comunicadores. Una acción que Anabel Navas, gerente del establecimiento nos contaba que enmarcan dentro de sus iniciativas gastronómicas coincidiendo con las diferentes estaciones del año, y cuyo objetivo no es otro que dar valor al producto autóctono de calidad, cercanía y de temporada.

Para ello, primero contactaron con Arnau Clari, de 27 años y natural de Poliñá del Xuquer, que es uno de los «vigilantes» de «els esmorzars», un trío de jóvenes que llevan cuatro años buscando y degustando por bares y pueblos los mejores almuerzos para recomendarlos a través de las redes en «La Ruta dels Esmorzars».

Lo que han conseguido con ello son más de 87 mil seguidores en Instagram, casi 60 mil en Facebook y una importante credibilidad como descubridores y consejeros para almuerzos valencianos.

Después de haber probado cientos y cientos de bocatas en pueblos, bares y polígonos, Arnau, con su tío Rafa Escrivá, hostelero jubilado y apasionados ambos por la cocina de la terreta, realizaron y presentaron un almuerzo de su propia inspiración basado en las tradiciones, la cultura, la cocina y la huerta valencianas al apostar por la carne de caballo, tan típica de l’Horta Nord i Sud, La Ribera e incluso en muchos bares de la propia capital.

En una típica pataqueta valenciana, del horno de Jesús Machí, nos presentaron un bocadillo con filetes de gustosa y tierna carne de caballo, acompañada de ajos tiernos, un alioli aderezado con miel y romero y una base de patatas fritas. No faltó el valenciano «cacau del collaret» y las típicas olivas partidas, la cerveza y para rematar, café o un cremaet, preparado y explicado paso a paso en directo.

Ese mismo almuerzo completo se ofrece ya cada mañana en el restaurante Mi Cub, al precio de 9 euros, enmarcado dentro de la iniciativa «Las Cuatro Estaciones de la Terreta» como típico almuerzo valenciano.

La carne de caballo, aunque relegada durante años por una cuestión cultural, tiene un alto valor protéico, poca grasa y es más rica en hierro o similar que la de otras carnes rojas como la ternera.