La Guardia Civil ha detenido al copropietario de una empresa de transportes con sede en Cabanes (Castellón) acusado de suplantar la identidad de su propia compañía para desviar mercancía al mercado negro.

Según ha informado el instituto armado, el detenido está siendo investigado por doce delitos de usurpación de identidad, falsificación de documentos y coautoría en la apropiación indebida de un cargamento de placas solares valorado en 200.000 euros, perteneciente a una empresa holandesa y con destino a Francia, del que nunca se dio razón de su paradero.

Los hechos se remontan a finales del pasado año, cuando una empresa afectada denunció irregularidades en la contratación de servicios logísticos realizados supuestamente en su nombre. A través de una identidad comercial modificada, se establecían acuerdos con otras compañías para transportar mercancías que eran posteriormente desviadas a circuitos ilegales.

El fraude se ejecutaba mediante el uso de datos y documentación interna de la propia empresa denunciante, lo que ocasionó un grave perjuicio reputacional y operativo, según la Guardia Civil.

La investigación, denominada Operación Solar, se inició tras recibirse varias denuncias de empresas víctimas del mismo tipo de engaño. Los agentes determinaron que los autores conocían en profundidad el funcionamiento interno de la firma suplantada, lo que llevó a centrar las pesquisas en su entorno más cercano.

Finalmente, se confirmó que uno de sus copropietarios había articulado toda la operativa fraudulenta, coordinando los envíos desviados desde cuentas de correo electrónico corporativas y contando con la colaboración de varios conductores implicados en la recepción de mercancías que nunca llegaban a su destino.

La Guardia Civil ha logrado identificar y localizar en el extranjero a varios transportistas vinculados con la trama y mantiene abiertas las gestiones para recuperar el material sustraído y desmantelar completamente la red implicada en el desvío de las placas solares.

Las diligencias han sido puestas a disposición de los juzgados de Castellón. La actuación ha sido llevada a cabo por agentes del Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Oropesa del Mar.