Infraestructuras

El Gobierno rechaza la segunda pista del aeropuerto de Alicante porque "las aerolíneas no la necesitan"

Respecto a la conexión ferroviaria de la ciudad y el aeródromo, el ministro de Transportes, Óscar Puente, asegura que “vamos a poner el turbo”

El ministro de Transportes, Óscar Puente, se ha reunido hoy el con el alcalde de Alicante, Luis Barcala, en el Ayuntamiento
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, comparece ante los medios de comunicación para trasladar información sobre actuaciones de servicio público ferroviario, en la sede del Ministerio.Agencia EFE

Dos días después de que un estudio de la Cámara de Comercio de Alicante evaluará la necesidad de una segunda pista en el aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, por el impacto negativo que tiene para la economía de la provincia y de la Comunidad Valenciana carecer de ella, el Gobierno ha rechazado hoy su construcción. Y ha sido el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, quien, en Alicante, ha indicado que “a corto plazo” no es necesaria la segunda pista para la provincia.

La razón, según el titular de Transportes, es que “las aerolíneas, que son las que pagan con sus tasas, no la necesitan; y si no me creen, pregunten a Javier Gándara, cuya compañía -easyJet- acaba de abrir una base en Alicante”.

En una conferencia organizada por el Foro Alicante del diario Información delante la ministra de Ciencia y líder del PSPV-PSOE, Diana Morant, y decenas de representantes empresariales e institucionales de la provincia y la Comunidad Valenciana, el ministro ha explicado que las nuevas pistas de vuelo "no las paga" el Ministerio "sino las aerolíneas" a través de las tasas aeroportuarias.

Las aerolíneas pagan la segunda pista

Y ha proseguido que estas compañías aéreas que operan en el aeródromo situado en El Altet "son las que tienen que decidir si hay una segunda pista y dicen abiertamente que no hay una necesidad de una segunda pista en el aeropuerto de Alicante, que no la necesitan".

Según Puente, así se lo han trasladado muchos responsables de las compañías, entre ellos el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) y de EasyJet, Javier Gándara, quien le ha trasladado que "ahora mismo las aerolíneas no la consideran necesaria".

El ministro ha subrayado que esto no significa que Alicante carezca de potencial de crecimiento y ha añadido que, por ello, el Ministerio sí prevé acometer la ampliación de terminales en los aeropuertos de Valencia y Alicante con una inversión de 1.000 millones de euros, el 60 por ciento de ellos para el segundo.

Según la previsión de AENA, el aeropuerto de Alicante-Elche pasará en los próximos años de 16 millones de pasajeros a 26; la ampliación de la terminal del aeródromo, según el ministro, permitiría absorber esa cifra.

Para respaldar su argumento, Puente ha puesto sobre la mesa dos ejemplos; el del aeropuerto londinense de Gatwick, con 35 millones de pasajeros con una sola pista, y el de Heathrow, que tiene casi 90 con dos pistas.

"Si la preocupación del territorio -en alusión a la provincia de Alicante- es que vengan turistas, el aeropuerto va para ganar viajeros” al tener mayor capacidad mediante las nuevas terminales, según el ministro antes de apostillar que "si se detectara que para crecer debe haber una segunda pista, no hay ningún problema".

Sobre la conexión ferroviaria entre la ciudad y el aeropuerto -una reivindicación histórica de la ciudad y la provincia- Puente ha asegurado que “vamos a poner el turbo” para ejecutar esa infraestructura tan demandada y la variante de Torrellano, aunque no ha querido comprometer plazos, “pero vamos a poner toda la carne en el asador para que la variante se haga lo más rápido posible”.

Vis a vis Barcala y Puente

En su visita a la ciudad, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, se ha reunido con el alcalde de Alicante, Luis Barcala, en el Ayuntamiento y han tratado sobre infraestructuras y proyectos cruciales para la ciudad y en los que ambas administraciones tienen algo qué decir. Antes del encuentro, el propio Barcala ha aclarado cuáles eran las reivindicaciones para Puente y, por tanto, para el Gobierno central. Se trata de cuatro, la variante de Torrellano; es decir, el proyecto para llevar el tendido ferroviario por el interior y poder liberar la vía férrea del litoral sur alicantino camino del aeropuerto.

Otro asunto ha sido la posibilidad de liberar el peaje de la AP-7 para descargar así la autovía A-7 y, como no podía ser de otra forma, también han tratado sobre la cesión de la playa de vías que hay junto a Casa Mediterráneo para poder ampliar así el Parque del Mar y la construcción de la estación intermodal, anexa a la estación de ferrocarril.

Si de algo han hecho gala los dos políticos antes del encuentro es de su sintonía algo que, según han comentado, se debe a que coincidieron en la Junta Directiva de la Federación de Municipios y Provincias y al vínculo personal de Puente con Alicante.