Crítica de cine

"Hitler’s Hollywood": Los judíos del Titanic

"Hitler’s Hollywood": Los judíos del Titanic
"Hitler’s Hollywood": Los judíos del Titaniclarazon

Dirección y guión: Rüdiger Suchsland. Intervienen: Hans Albers, Heinz Rühmann, Zarah Leander, Adolf Hitler, Ilse Werner. Alemania, 2017. Duración: 105 minutos. Documental.

Lo que ahora conocemos como «fake news» es un fenómeno más viejo que el mundo. Los nazis lo practicaban con el nombre de propaganda. Con la excusa de dominar a las masas, por poner un ejemplo flagrante, los judíos, y no un iceberg, se convertían en los culpables del hundimiento del Titanic. Es uno de los datos que el documental de Rudiger Suchsland, segunda parte de una trilogía dedicada a la historia del cine alemán desde los tiempos de la república de Weimar hasta la posguerra, divulga en su exhaustivo repaso a la filmografía nazi, más de mil títulos que hicieron del patriotismo, la xenofobia, la evasión de la realidad y la pulsión de muerte, siempre de aliento sacrificado, armas de destrucción masiva para un pueblo que decidió creerse los panfletos fascistas con el fin de vivir en la inopia. Para los que hayan leído a Siegfried Kracauer o Thomas Elsaesser es posible que este ensayo no les diga gran cosa a nivel conceptual, tampoco para los que sepan hasta qué punto la aparición de la cultura de masas andaba ligada con la consolidación de los totalitarismos. Con todo, el material que maneja Suchsland es fascinante, y ahí sí que puede y debe ganarse a cinéfilos y a rastreadores de rarezas. A veces el exceso de voz en off ahoga las imágenes que su espíritu de ávido investigador ha acumulado, y no las deja respirar lo suficiente, pero la variedad de ejemplos, géneros (con comedias, melodramas y musicales a la cabeza), autores y actores (con la aparición estelar de una Ingrid Bergman pre «Casablanca») es abrumadora, y demuestra con creces la calidad formal y la ignominia programática que animó la producción de la UFA bajo el mandato de Goebbels, ese David O. Selznick vestido con uniforme que creó un Hollywood europeo para anestesiar a la raza aria.