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Arte con historia

De los Medici a los Rothschild

La importancia de las relaciones políticas de los banqueros a través de sus colecciones. Esta muestra recorre las raíces del mecenazgo y de la Historia del Arte.

Lorenzo el Magnífico muestra sus joyas al Duque de Milán, Galeazzo Maria Sforza, para certificar su poderío.
De los Medici a los Rothschild Galleria d'Italia

Se sabe que el coleccionismo y la filantropía forman parte del modus operandi de la banca. Desde el Renacimiento hasta nuestros dias, en Europa y más adelante en Estados Unidos, artistas e intelectuales han gozado del apoyo de los banqueros, aquellos que han apostado por la cultura y el arte, muchos por gusto personal y otros lo han utilizado como un instrumento "noble" de devolver al mundo los patrimonios artísticos.

En la Galleria d’Italia, el museo del grupo bancario Intesa Sanpaolo en Milán, en la muestra de los Medici a los Rothschild, están expuestas muchas de las piezas con las que se puede aprender la importancia de la relación entre los banqueros y el arte.

La exposición arranca con una gran pintura en donde se aprecia a Lorenzo el Magnífico, mostrandouna parte de su colección de orfebres, joyas y vasos a Galeazzo María Sforza, Duque de Milán, miembro de la familia Sforza que fueron famosos por ser grandes patrocinadores de las artes y de la música. Esta escena representa cuando en marzo de 1471, Galeazzo y su esposa visitaron Florencia y da constancia a la importancia de las relaciones políticas a través de las colecciones privadas de arte. Un banquero debía de poseer una gran colección de arte para hacerlo aún más poderoso y socialmente también se utilizaba como se puede contemplar en en esta obra en la que aparecen las esposas de ambos, Bona di Saboya, duquesa de Milán y segunda esposa de Galeazzo María Sforza y a su lado, también sentada, aparece Clarisa Orsini la esposa de Lorenzo el Magnífico. En estos encuentros (no casuales), se podía mostrar el poderío del anfitrión a través de sus bienes incluyendo las obras de arte que poseía y por supuesto las joyas, obviamente el encuentro de desarrollaba en el salón principal del palacio, nada era casual. En aquella época, las colecciones de arte privadas no se exponían al público, tuvieron que esperar al período del iluminismo para construir museos y dar acceso al pueblo para mostrar su riqueza. A través de sus colecciones también mostraban sus gustos.

Retrato de Lorenzo el Magnífico
Retrato de Lorenzo el MagníficoGalleria d'Italia, Milán

Los banqueros toscanos en el Renacimiento, se movían entre Lucca, una de las ciudades más importantes de la Toscana italiana y Florencia, pero no se quedaron solamente dentro del territorio italiano, llegaron también hasta Brujas en Bélgica al ser el mayor centro económico y artístico de Flandes. De la época destacan figuras como la de Cosme el Viejo (Medici), Lorenzo de Medici y el mismo Lorenzo el Magnífico. Cosme, por poner ejemplo, coleccionó, sobre todo, manuscritos antiguos y gemas, pero también pidió a artistas como Donatello obras arquitectónicas de gran envergadura.

Hay un nombre importante que se debe recordar cuando se habla de esta época y de esta actividad en el mundo del arte, me refiero a Vincenzo Giustiniani, un hombre perteneciente a la nobleza genovesa, que tenía veneración de lo antiguo y una verdadera pasión por Caravaggio. Había nacido en la isla de Chios, su familia finalmente la compró. En 1600, con la llegada de los otomanos, tuvieron que escapar y refugiarse en Roma. En la capital italiana adquirieron el Palacio Giustinianiqueactualmente es la sede de la presidencia del Senado de Italia. Dentro del palacio, ya establecidos en Roma, crearon la famosa Galería Giustiniana. Estaban locos por las esculturas y coleccionaron infinidad de piezas clásicas griegas y romanas. Esta colección llegó a ser en su época la más importante del mundo, contaba con cerca de 1800 esculturas que se exponían dentro del palacio. Los artistas podían frecuentar la casa de los Giustiniani que también se convirtió en residencia en donde vivían y trabajaban para la familia.

Los Giustiniani fueron los precursores en crear catálogos de arte. Dos de ellos están expuestos en esta muestra. Fueron también de los que más protegieron a Caravaggio llegando a tener en su galería de Roma más de 15 obras del famoso artista. Su palacio fue uno de los primeros sitios que se abrieron para el deleite de artistas, conocedores de arte y coleccionistas. Cuando llegó la ocupación francesa a Roma tuvieron que ceder sus tesoros, vendiéndolos en gran parte a los miembros de la familia Torlonia y las pinturas al rey de Prusia.

Sara Raimondi, es la guía que explica claramente la muestra de las colecciones de los banqueros en la Gallería d’Italia en Milán. Es licenciada en Historia del Arte y especializada en el Renacimiento. Su tesis fue sobre la historia y la crítica del arte y comenta que, al final la familia Torlonia, compró prácticamente toda la colección Giustiniana.

En una de las salas principales de la galería está expuesta una de las piezas más preciosas de esta colección, San Jerónimo - San Girolamo. Se trata de la pintura que realizó Caravaggio que al parecer, fue la última que pintó antes de matar accidentalmente a Ranuccio Tomassoni, durante una pelea después de un partido de pallacòrda en la zona de Campo di Marzio en Roma. La pallacòrda era un juego parecido al tenis. El artista después de este incidente tuvo que salir huyendo de Roma ya que al que había matado, era hijo de alguien muy cercano al papa. Esta obra está actualmente conservada en el Museo del Monasterio de Montserrat de Barcelona.

San Jerónimo
San JerónimoGallería d'Italia Milán

Otra de las piezas claves de la colección de los banqueros es la que Miguel Ángel hizo cuando tenía solamente 15 o 16 años, se trata de La Madonna della Scala que fue una de sus primeras obras. Es tan perfecta que parece creada con cera pero el material usado fue mármol. Fue parte de la colección de Cosimo y Lorenzo de Medici.

Madonna della scala.
Madonna della scala. Gallería d'Italia, Milán

El libro escrito por Vasari “LE VITE” es una pieza fundamental para los amantes del arte

Desde Cosimo y Lorenzo de’ Medici hasta la dinastía de los Rothschild, fueron los grandes mecenas y coleccionistas de arte de todos los tiempos.

Gracias a los archivos, retratos y documentos, se puede conocer la importancia en la historia no solo dentro del mundo de las finanzas, sino también dentro del mundo del arte. No se puede no mencionar que en los Estados Unidos, en 1900, se inicia una gran actividad en el coleccionismos de los hombres de las finanzas. Paralelamente a los Rothschild, se une la figura de John Pierpont Morgan (JP Morgan) de Andrew Mellon y de su hijo Paul como coleccionistas privados desarrollando museos internacionales como la Pierpont Morgan Library de New York, la National Gallery de Washington, la Mellon Center for British Art de la universidad de Yale o el Museo Virginia de Bellas Artes de Richmond.

La muestra se puede visitar hasta el 26 de Marzo de 2023.