Cultura

Entrevista

Vanesa Martín: «Me encantaría cantarle al ego de los políticos con ironía y humor»

Lanza este viernes una edición deluxe de «Siete veces sí», álbum que publicó en 2020 y al que añade cinco temas

Imagen oficial de Vanesa Martín.
Imagen oficial de Vanesa Martín.Warner Music Spain

En la música de Vanesa Martín corren tiempos de introspección, de recuperación y abrazo a las raíces. Impaciente por viajar y reencontrarse, la artista malagueña lanza el próximo 10 de diciembre una edición deluxe de «Siete veces sí», álbum que publicó en 2020 y al que añade cinco canciones y un DVD que contiene el especial navideño que realizó junto a Joaquín Sabina o Manuel Carrasco. Reclama «el espíritu de que todo se va a renovar y va a estar bien», y mantiene su forma de cantarle a la vida, desde el respeto y su carácter incombustible.

¿Por qué una reedición de un disco tan reciente?

Quería cerrar el ciclo, dejar ahí guardado todo lo que ha significado este disco tan especial en un momento tan convulso, difícil y dramático para todos. He aprendido muchísimo, siento que he crecido gracias a atreverme a salir de gira, ver la realidad, conocer, aunque fuera contraproducente y me dijeran «estás loca». Quería ver cómo la gente está viviendo esto y se generó una complicidad muy verdadera y pura. La sociedad tiene ganas de rehacer su vida y olvidarse de esta pandemia que parece ciencia ficción.

¿Cuál era el temor para que «estuviera loca»?

Hacerlo. Los aforos eran muy pequeños y al hacer una inversión fuerte para la producción hay veces en las que, sinceramente, no me ha quedado absolutamente nada a nivel económico. Pero me da igual, yo quería vivir la experiencia. Ya vendrán los conciertos grandes.

¿Cuál es la clave de este nuevo «Siete veces sí»?

Las ganas de vivir, de salir y de arremeter contra la situación dramática. Decir «no» y reponerse, seguir. Un músico de mi equipo me dice «jefa, tú tienes el machete en la boca, campo a través y nosotros contigo». En el álbum está esa rebeldía de no conformarme con que me obliguen a estar parada.

¿Hace falta más optimismo?

Totalmente. Ahora hay muchas cabezas que se han quedado con los cables pelados. Quien es buena persona ha fomentado que sea aún mejor, pero el que tenía un fondo gris ahora lo tiene negro. Para los sociólogos la actualidad es un caldo de cultivo.

En «Y yo latiendo», el single, hay aires flamencos, ¿quería recuperar sus raíces?

Vengo de ahí, cuando hay una fiesta en mi casa se saca el cajón y empiezo a hacer el repertorio de Manzanita, Tijeritas, coplas o rumbas de todo tipo. Ahora, con todo lo que está cambiando la industria pensé en hacer lo que yo realmente hago cuando estoy en casa.

¿Se siente más cómoda en ese estilo?

Me siento igual. En mis conciertos soy muy camaleónica, voy encontrándome de maneras diferentes. La música no debe tener calles.

Entre las canciones nuevas publica «Soy» en beneficio a la lucha contra el cáncer de mama, ¿cómo lo trata?

Me daba miedo caer en un tópico o en hacer demagogia, pero como mujer empatizo y sé que nos puede pasar en cualquier momento. Empiezo diciendo que «ha venido a visitarme un nuevo amigo que pretende estar conmigo y me ha pillado por sorpresa». Como cuando se presenta alguien en casa e ibas a salir a la calle, pero dándole la importancia que tiene la enfermedad. Hablo del proceso del miedo, del aceptarse a sí misma, mirarte al espejo y seguir adelante.

¿Cuál es la situación actual de esta realidad?

La pandemia ha contribuido a que se hayan ralentizado los tratamientos y hayan empeorado. Eso no se puede permitir, porque hay vidas en juego.

¿A qué otro aspecto le gustaría dedicarle un tema?

Me encantaría cantarle al ego de los políticos. Con mucha ironía y sentido del humor.

¿Por qué no lo hace?

Todavía no tengo la habilidad, me salen cosas que no son políticamente correctas, tengo que buscar la forma (ríe).

¿A quién le canta en «La fiesta del tutú»?

A una persona en concreto, a quien le veo perdido en el mundo. La canción habla de cuando necesitas rescatar a alguien. Cuando te ves con los focos en un escenario, de repente estás fantástico, es emoción pura, pero no puedes perder de vista la realidad. Debes valorar lo que tienes.

¿Siempre ha tenido los pies en la Tierra?

Con mi familia es imposible no tenerlos.