Iberostar Tenerife o cómo hacer un equipo campeón en seis meses

La mitad de los entrenadores que no están en la Copa del Rey han apostado que el Iberostar Tenerife será el finalista de la parte del cuadro que disputa mañana sus cuartos de final. El equipo de Txus Vidorreta es el único de los equipos que está en Málaga que ya sabe lo que es ganar un título en 2020. El pasado fin de semana los isleños lograron el tercer título de su historia al imponerse en la final de la Copa Intercontinental a la Virtus de Bolonia (80-72) de Sasha Djordjevic y Milos Teodosic.

“Se trata de un equipo muy táctico, con mucho talento y mucha experiencia”, asegura Ibón Navarro, técnico del MoraBanc Andorra, su rival en cuartos. Y todo eso ha llegado con una plantilla casi nueva. Once de los doce jugadores de Txus Vidorreta no estaban el año pasado en Tenerife. Sólo el polaco Tomasz Gielo formaba parte de los aurinegros hace un año. La profunda renovación no ha impedido que en apenas seis meses el equipo haya llegado como cabeza de serie a la Copa, sume ocho victorias en las últimas diez jornadas y sea la alternativa más consistente a los dos grandes. El club afronta su cuarta Copa consecutiva y en las dos últimas ya alcanzó las semifinales. En la isla están convencidos de que ha llegado la hora de dar un paso adelante.

El equipo se ha puesto en manos de dos clásicos de la ACB, un base y un pívot: Marcelinho Huertas y Giorgi Shermadini. El brasileño de 36 años fue el MVP de la Copa Intercontinental. Es el mejor pasador de la Liga (7,8 asistencias por partido) y está a cinco asistencias de convertirse en el mejor de la Copa del Rey superando las 109 de Pablo Prigioni. El pívot georgiano es el segundo jugador más valorado de la ACB sólo por detrás de Mirotic, el quinto máximo anotador (18,4 puntos) y el quinto mejor reboteador (7,2). En el único precedente de esta temporada, disputado hace dos meses, el equipo amarillo conquistó el Principado con un inspirado Santi Yusta (76-86). Los cuatro triples en el último cuarto del canterano del Real Madrid fueron decisivos.

Enfrente estará el MoraBanc Andorra que disputa la tercera Copa de su historia. Se estrenó en 1995, pero fue hace tres años en Vitoria cuando estuvo muy cerca de eliminar al Madrid. Fue el año del famoso campo atrás de Llull que terminó con la victoria madridista en la prórroga.