Snowboard

La desescalada de Josito Aragón: vuelve a la Copa del Mundo dos años después

Se rompió dos vértebras justo antes del confinamiento, pero ya está de regreso y con los Juegos Olímpicos de 2022 como gran objetivo

Josito Aragón, snowborder
Josito Aragón, snowborderFermin RodriguezInstagram

Apunten este nombre: José Antonio Aragón. Y cuando en los Juegos de Invierno de 2022 haga un buen papel en snowboard, no se les olvide que lo leyeron aquí primero. Josito sueña con estar entre los mejores del mundo en la cita olímpica de Pekín y el primer paso lo va a dar el próximo 6 de enero en Austria, donde se estrena en la Copa del Mundo después de dos años fuera por culpa de las lesiones y esta pandemia que le ha complicado la recuperación.

El rider granadino se rompió dos vértebras en una caída justo antes del confinamiento y las restricciones sanitarias obstaculizaron su vuelta, tanto, que llegó a plantearse incluso abandonar. «Vengo de una familia que puede permitirse el lujo de hacer snowboard, pero con tantos viajes y competiciones costeadas por ti, llega un momento que no se puede soportar. Con la Covid-19 la cosa de dinero estaba peor, como le ha sucedido a todo el mundo, y por la cabeza pues se te pasa dejarlo, supongo que como a la mayoría de españoles», asegura.

«Al final hemos salido bien de la situación, con alguna ayuda hemos podido ir tirando y ahora tengo la cabeza enfocada en las competiciones. Y tengo claro lo que tengo hacer», continúa ilusionado por volver a poder competir entre la élite mundial. Este tiempo lo ha aprovechado para entrenar duro e idear una buena cantidad de trucos para sorprender a los jueces. Porque el snowboard freestyle que practica Josito consiste en eso. En volar sobre la nieve y hacer piruetas lo más complicadas posible. Una especie de gimnasia artística sobre una tabla que tiene dos modalidades: el slopestyle (un circuito con saltos y barandillas sobre las que impulsarse) y el big air (un enorme salto).

«Tengo muy buenos trucos en la recámara que creo que van a funcionar», confiesa. «Algunos ya los ha inventado otra gente, pero si sacas uno nuevo que nadie está haciendo y es difícil, pues claramente lo puedes poner en tu ronda. Lo que cuenta para los jueces es la amplitud, la armonía, el aterrizaje y la originalidad, que es un valor muy importante».

La pasión de Josito, como buen granadino, nació en Sierra Nevada, aunque desde que se convirtió en profesional se pasa la vida viajando entre Austria y Suiza, los mejores lugares para progresar. Canadá es la gran potencia del snowboard, pero su entrenador actual es neozelandés. Un día de trabajo incluye cinco horas por la mañana en la nieve y una sesión física por la tarde para mantener el balance entre el buen estado de forma y el «feeling» con la tabla.

El coronavirus cerró casi todas las estaciones austriacas que usa para trabajar y la exigencia de PCR negativas recientes complicó los desplazamientos. Una etapa ya superada, en la que la montaña le servía más que nunca de liberación. «Me ayuda a despejarme y no pensar en nada. Allí arriba solo disfruto y no me lo tomo como un trabajo. Que lo es en realidad, pero estoy contento y me gusta, es mi pasión», confiesa Josito sobre una forma de desescalada de lo más espectacular. El día de Reyes comienza otra vez a volar junto a los mejores del mundo, entre ellos, el canadiense McMorris, su ídolo de siempre.