¿Hasta cuándo Doncic?

El Real Madrid tiene asumido que la temporada que arranca hoy puede ser la última del genio esloveno en el club.

El Real Madrid, la ACB e incluso la Euroliga están en manos de un adolescente de 18 años que ya ha ganado dos Ligas, dos Copas del Rey y que hace dos semanas fue campeón de Europa con Eslovenia. Luka Doncic es el gran nombre propio y una de las pocas certezas de una temporada que arranca hoy y que está plagada de incógnitas. En un año de transición hacia la Liga de 16 equipos –temporada 2019/2020–, con un calendario que para un jugador de los equipos grandes se puede ir más allá de los 100 partidos (Eurobasket, Supercopa, Liga, Copa, Euroliga y ventanas FIBA), ésta es la «Liga de Doncic». Los entrenadores y los directores deportivos de la ACB lo tienen muy claro. Doncic es el más firme candidato al trofeo de MVP (Jugador Más Valioso), el segundo mejor jugador del torneo por detrás de Llull, su compañero ahora lesionado, y el mejor base de la competición. Sergio Scariolo ya lo resumió tras sufrirle en el Eurobasket: «Es para frotarse los ojos, me deja boquiabierto».

Ésta podría ser la última temporada del balcánico con el Real Madrid. Los planes iniciales de su entorno contemplaban una elección altísima en el «draft» de 2018, pero apostaban por su continuidad en el equipo de Laso una temporada más. Ese también era el plan del Madrid, que desembarcase en la NBA en la temporada 2019/20, pero... «Es probable que Luka vaya a la NBA pronto», comentó su padre y ex jugador, Sasa Doncic, en el Europeo. La advertencia coincide con las últimas predicciones del «draft». Antes de ganar el oro con Eslovenia, en un torneo en el que fue junto a Dragic el jugador determinante de los campeones, ya estaba incluido en el «top 5». Su verano le ha situado en el «top 3» y eso con el nuevo marco salarial de la NBA supone muchos ceros en el contrato. Los tres primeros jugadores del «draft» cobran entre 28,6 y 23 millones de euros por sus cuatro primeras temporadas.

Otro factor que le ha animado a adelantar su salida han sido las conversaciones con su seleccionador, Igor Kokoskov. Al técnico serbio, que lleva toda la vida como entrenador ayudante en la NBA, le ha «vendido» muy bien aquella Liga y le ha animado a dar el salto cuanto antes. «Doncic nunca ha tenido este rol antes en su carrera, esto es lo esencial. Esto es otro nivel, eso no es el Madrid, su rol es distinto», comentó.

En el Madrid tienen asumido que la salida de Doncic es inevitable. Ahora se trata de aumentar su responsabilidad en el equipo y más después de la lesión de Llull. Su sueldo ya no es, como sucedía al principio de la pasada temporada, el más bajo de la plantilla ni de lejos. Y la claúsula de rescisión para su salida a la NBA está lejos de los 5 millones de euros que figuraban en su anterior contrato. Con estos guiños se le ha tratado de hacer la vida más cómoda, pero nada podrá evitar una salida que lo más lejos que se vislumbra es en 2019. Por eso el comentario del capitán blanco, Felipe Reyes, es un deseo irrealizable: «Es un jugador que con 18 años ha conseguido cosas que nadie había logrado. Después de la baja de Llull a él le ponen ahí arriba y a lo mejor es mucha presión para un chaval de 18 años. Hay que cuidarlo, pero le veo capacitado para liderar a este equipo muchos años». 2019 es el límite.