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77-88. Campazzo, imperial en Milán

El base argentino se adueñó del partido y lideró la victoria del Madrid para asentarse en la cuarta plaza. El grupo olvidó la debacle en el Palau con un actuación convincente

Campazzo fue una pesadilla para la defensa del Armani Milán
Campazzo fue una pesadilla para la defensa del Armani Milánlarazon

El base argentino se adueñó del partido y lideró la victoria del Madrid para asentarse en la cuarta plaza. El grupo olvidó la debacle en el Palau con un actuación convincente.

El «Facu» es uno de esos jugadores que se sienten cómodos en el papel de protagonista. Le va el rock and roll. La baja de Doncic, que podría tener minutos el sábado en Zaragoza, ha convertido al base argentino en la pieza más decisiva entre los exteriores de Laso. Su respuesta ante el desahuciado Armani Milán fue sobresaliente. Gobernó el partido con autoridad cuando los italianos estaban lejos de rendirse. Él lideró el tirón definitivo del Madrid entre el final del tercer cuarto y el arranque del último, cuando su equipo se disparó con más de 20 puntos de ventaja. Con el trabajo hecho y después de haber generado más de la mitad de los puntos del Madrid (14 puntos y 11 asistencias que adornó con 6 rebotes), Campazzo se fue al banquillo. La posterior reacción desesperada de los italianos sirvió para que uno de los equipos más flojos de la competición se marchara sin el gesto torcido.

Además de Campazzo, el Madrid mandó en Milán por varios detalles. De salida, Tavares impuso su ley. En menos de cinco minutos colocó 3 tapones e intimidó en un par de jugadas para marcar territorio. Cuando el gigante africano aparece así en los partidos sus compañeros ganan en confianza. En el segundo cuarto una racha de triples de cuatro jugadores diferentes (5 casi seguidos) sirvió como pista de despegue. Y la mejor evidencia de que fue una victoria coral fue el reparto de puntos. Seis jugadores anotaron entre 9 y 15 y el más productivo fue Ayón. El mexicano es una de las numerosas piezas que Laso debe ensamblar en la próximas semanas para seguir aspirando a todo.

La victoria permite al Madrid asentarse en la cuarta plaza –la última que da el factor cancha en cuartos– y afrontar con ventaja la recta final de la primera fase. La próxima semana hay sesión doble: viaje a Valencia y la decisiva visita del Zalgiris al WiZink Center. Los lituanos son la alternativa al Madrid, aunque su calendario es de todo menos amable. Mañana visitan Vitoria y todavía tienen pendiente medirse a los blancos, al CSKA y al Olympiacos. Los blancos cierran la primera fase en Belgrado y ante el Bamberg, partidos que deberían ser sendos trámites.