Superable

Mientras todos los madridistas esperamos expectantes a ver si Cristiano y Benzema pueden llegar al decisivo partido del miércoles ante el City, el equipo de Zidane sigue imparable, muy seguro, ganador. Y un jugador ha tomado el mando en el ataque: Gareth Bale. La temporada está siendo muy dura. Todos los grandes equipos sufren en sus carnes lesiones, bajones físicos y curvas en su rendimiento. El Madrid también las ha tenido, e importantes. Pero el galés, el último superviviente de la BBC, guió el sábado al equipo a un triunfo muy meritorio en Anoeta. Su gol, un testarazo espectacular que hubiera firmado el mismísimo Santillana, sirvió para seguir enganchados a la lucha por la Liga.

- Estrella y líder

Bale es una estrella. Es un delantero muy completo en todos los apartados del juego: rápido y potente, con un gran dribling, poderoso en el juego aéreo y con un tremendo disparo con el cañón que tiene en su pierna izquierda. Y como buen zurdo posee un don especial, un talento extraordinario para ir eliminando adversarios en carrera. Y, además, una gran visión de juego, es solidario en el esfuerzo. Su futuro cada vez parece más grande. Está llamado a ser muy pronto el líder indiscutible de este Real Madrid. Y si no, repasen sus números en esta Liga: 19 goles en 22 partidos, 10 asistencias y todo lo que aporta al equipo que no es cuantificable con las matemáticas.

- Yo me veo en Milán

Bale será el próximo miércoles nuestra gran esperanza para llegar a la tan ansiada final de Milán. Ojalá puedan estar a punto Cristiano y Karim, vamos a esperar su evolución. Pero tengo claro que, con o sin ellos, el galés va a ser el gran protagonista del pase a la final... junto con el inestimable apoyo de la afición del Madrid. El Bernabéu va a ser otra vez el templo histórico del fútbol mundial. Ya lo vengo diciendo en «El Chiringuito» y en estas páginas: yo me veo en Milán. Y todos los madridistas.