Valverde consigue su segundo triunfo consecutivo en la Flecha Valona

El primer objetivo era salir ileso y Alejandro Valverde lo consiguió sin problemas. Por el camino se quedó uno de los favoritos, Gilbert, al que le sobraron 50 kilómetros de carrera, y algún otro hombre importante como Froome o Vanendert. El segundo objetivo era ganar, y ése pareció aún más sencillo para Alejandro. Afrontó en cabeza el ascenso al muro de Huy, con confianza, sin bicicletas que esquivar camino de su tercer triunfo en la Flecha Valona. Valverde mandaba desde el comienzo de la subida, convencido de sus posibilidades. “Es una subida que se me da muy bien. He decidido marcar el ritmo, para tenerlo controlado. A 200 metros sabía que iba a ser el vencedor, porque tenía esa chispa que necesitaba”, explicaba nada más cruzar la meta.

Purito, otro que tenía la carrera marcada en su cabeza, intentó seguir el ritmo de Alejandro, pero le resultó imposible, igual que a su compañero Dani Moreno. Les superaron Albasini y el joven Alaphilippe, un francés que todavía no ha cumplido los 23 años. Pero Valverde era inalcanzable para todos. Cuando levantó los brazos, sus rivales todavía llevaban la cabeza hundida en el manillar intentando limar algunos metros de distancia con las últimas pedaladas.

“Ha sido un día durísimo, con mucha tensión, muchas caídas, hacía tiempo que no recordaba una carrera con tanta tensión”, añadía. Él se libró de las caídas, desaparecido hasta los últimos kilómetros, aunque la actividad de sus compañeros de Movistar anunciaba que Valverde estaba preparado para todo. Antes de que él tomara el mando, Visconti se había escapado con Luis León Sánchez para que trabajaran los demás. Nibali, compañero de Luisle, no tuvo tanta paciencia y quiso marcharse en la Cherave, el muro añadido en esta edición de la Flecha. Valverde esperó, sin perder la paciencia, sabía que su momento no había llegado todavía. La experiencia, ya había ganado antes la carrera en dos ocasiones, estaba con él. Y el triunfo, también.

El segundo puesto en la Amstel Gold Race del pasado domingo, detrás de Kwiatkowski, le había servido de calentamiento. Valverde consigue su tercer triunfo en la Flecha Valona, el segundo consecutivo para él y el cuarto para España –Purito y Dani Moreno habían ganado en 2012 y 2013-. Ahora, por delante, le queda el reto de igualar a Merckx y ganar tres años seguidos en el muro de Huy. De momento, él prefiere centrarse en la Lieja-Bastoña-Lieja, que le espera el domingo y que ya ganó en 2006 y 2008. “La afronto con muchas ganas e ilusión”, dice. Y con la sonrisa del ganador.