El Barcelona siempre ganó cuando jugó las finales en su estadio

El Barcelona, que disputará la final de la Copa del Rey en el Camp Nou ante el Athletic el próximo 30 de mayo, jugó a lo largo de la historia de la competición tres veces en su estadio el partido decisivo y siempre se llevó el trofeo a sus vitrinas.

Concretamente, lo consiguió en 1912, en 1913 y en la temporada 1962/63, único año en el que jugó la final en su actual estadio. En las otras ocasiones, lo hizo en el Camp del Carrer Indústria, conocido coloquialmente como La Escopidora, donde el club azulgrana disputó todos sus encuentros entre 1909 y 1922.

En 1912 el Barcelona venció 2-0 como local al Gimnástica de Madrid, una entidad de fútbol amateur que se instauró como club deportivo multidisciplinar en 1887 y que inició en 1907 sus actividades futbolísticas. El conjunto azulgrana, con tantos de Alfredo Massana y José Rodríguez, alzó su segundo título.

Un año después, de nuevo en el mismo escenario y con polémica porque se celebraron dos torneos paralelos (uno lo ganó el Barcelona y el otro el Racing de Irún) a causa de las discrepancias entre los clubes españoles, el conjunto barcelonés repitió título.

En esta ocasión, su rival fue la Real Sociedad. En aquella época no existía la prórroga y los penaltis y fueron necesarios tres encuentros para conocer el nombre del campeón. Después de dos empates (2-2 y 0-0), ambos en La Escopidora, el campo blaugrana finalmente fue decisivo y el Barcelona ganó 2-1 con goles de Berdié y Apolinario Rodríguez.

La última ocasión que el club catalán ha jugado en su estadio una final fue en el curso 1962/63. Pasados cinco años desde que fue construido, el Camp Nou, denominado coloquialmente así hasta que su nombre se oficializó en 2001, albergó la final de la Copa entonces llamada del Generalísimo.

El rival del Barcelona, dirigido por José Gonzalvo, venció 3-1 al Zaragoza de "los Magníficos", en el que nombres como Marcelino Martínez, Juan Manuel Villa y Carlos Lapetra, no pudieron evitar la victoria de su rival. Chus Perea, Sándor Kocsis y José Antonio Zaldúa fueron los autores de los goles que dieron un título al cuadro azulgrana.

Pero el Barcelona no ha sido el único equipo que ha disputado una final de la Copa del Rey en su estadio. Real Madrid, Atlético y el mismo Athletic, también han jugado finales en el campo donde habitualmente disputan sus partidos.

El Athletic vivió ese caso solo una vez, en 1921, y consiguió llevarse la Copa del Rey tras ganar 4-1 al Atlético de Madrid. Ambos clubes jugaron en San Mamés y el club vizcaíno consiguió su octavo título para mostrarse como el gran dominador de la competición. Gómez-Acedo, con dos dianas, fue el héroe de aquella final.

Peor le fueron las cosas al Real Madrid, que jugó en su estadio once finales. En el Bernabéu ganó al Castilla 6-1 en 1980, al Sevilla 2-1 en 1962 y en el estadio de 0'Donnell 2-1 en 1908 al Vigo.

Las otras siete fue derrotado y en ocasiones de forma llamativa, como en el llamado "Centenariazo"del Deportivo, que venció 2-1 en 2002 o ante el Atlético de Madrid, su auténtico "coco"en las temporadas 2012/13, 1991/92, 1960/61, 1959/60.

Curiosamente, la única vez que el Atlético de Madrid disputó una final en el estadio Vicente Calderón, perdió. Y fue ante el Real Madrid, que se llevó la victoria tras ganar 4-3 en los penaltis después de que el partido acabara 0-0. Ocurrió en el curso 1974/75, el único en el que el conjunto blanco amargó una fiesta local en una final de Copa.