Fútbol

Cuando el gol se llama Simeone

Giovanni, el hijo mayor del Cholo, es el tercer máximo goleador de la Serie A, sólo por detrás de Vlahovic y de Immobile

Giovanni Simeone celebra uno de los goles que marcó al Venecia
Giovanni Simeone celebra uno de los goles que marcó al VeneciaEMANUELE PENNACCHIOAgencia EFE

Dusan Vlahovic ha sido el fichaje más caro de este invierno después de que la Juventus pagara 81 millones a la Fiorentina por su traspaso. Ciro Immobile, el delantero de la Lazio, fue Bota de Oro en 2020. Ellos son los únicos futbolistas que han marcado más goles que Giovanni Simeone esta temporada en la Serie A.

El hijo del Cholo ha encontrado su lugar en el Hellas Verona, un modesto que derrumbó barreras en 1985 al ganar la Liga inspirado por los fichajes de Briegel y Elkjaer Larsen, y que ahora está lejos de aspirar a los títulos, aunque vive cómodamente instalado en la mitad de la tabla. Para ellos son fundamentales los goles de Gio Simeone, que ya ha llegado a los 15 y ha superado su mejor marca en la Serie A. Es el tercer máximo goleador del campeonato y el mejor rematador argentino del momento.

El domingo volvió a marcar tres goles para la victoria de su equipo (3-1) ante el Venecia. Al “Cholito” no le gusta marcar los goles de uno en uno. Ha concentrado once de sus quince goles en cuatro partidos. Su mejor actuación llegó en la goleada ante el Lazio, al que marcó cuatro goles en octubre. “No había visto una actuación así en mucho tiempo, no sólo por los cuatro goles, sino también por los movimientos, la energía, la presión, fue realmente impresionante”, decía su entrenador, el croata Igor Tudor, un histórico de la Juventus.

Cuatro goles, los mismos que consiguió ante la Lazio en un partido eran los que había marcado Giovanni Simeone con River Plate cuando el Genoa pagó cinco millones por su traspaso. No era mucho dinero, pero entonces el hijo mayor del Cholo tenía más apellido que goles y más futuro que presente. Tenía 21 años y cerró la primera temporada con 12 goles en 35 partidos en la Serie A. Buenos números para un casi debutante que confirmó un año después en la Fiorentina. 14 goles en 38 encuentros.

La frecuencia goleadora decayó y provocó su salida de la Fiorentina. Primero tuvo un paso por el Cagliari, que esta temporada lo ha cedido al Verona con opción de compra. El Hellas ya piensa en rentabilizar su traspaso y su agente Leo Rodríguez, que fue un futbolista excepcional y campeón de la Copa América junto a su padre, se imagina un equipo más poderoso para acoger a su representado la próxima temporada.

Giovanni Simeone nació en Madrid y comenzó a jugar al fútbol en el Rayo Majadahonda y se empieza a hablar de su regreso a los campos de entrenamiento del Cerro del Espino en los que se ejercita el Atlético. Algo de lo que habló hace tiempo, aunque su padre prefiere no pensarlo.

“No me gusta hablar mucho desde el punto de vista del papá, pero sí desde el del entrenador. Es un chico que tiene todo para jugar conmigo, pero desgraciadamente no lo voy a traer nunca. No quiero decir nunca, pero...”, aseguraba Diego Simeone en 2018 en una entrevista en “El Partidazo” de la cadena Cope. “Es muy difícil tener un hijo en el vestuario. Para él, para la relación... Si dentro de cinco años se hace una figura más importante de la que es hoy hablamos de otra situación. Está haciendo su carrera de la mejor manera. Puede que algún día no esté yo en el Atlético y él pueda venir”, añadía.

Aquel año fue el de su debut con la selección, con la que ha jugado cinco partidos y ha marcado un gol contra México. Desde entonces no ha vuelto a ser convocado, aunque sus actuaciones en Italia pueden devolverle la camiseta albiceleste.

El Verona ya piensa en un traspaso de 25 millones de euros. Si Giovanni llegara al Atlético podría ser el tercer Simeone del equipo. Su hermano Giuliano hizo la pretemporada con el primer equipo y fue el máximo goleador del verano rojiblanco. Ya ha sido convocado en alguna ocasión esta temporada, pero aún no ha debutado oficialmente con el primer equipo. Con el B ha marcado tres goles en quince partidos. “Está trabajando muy bien. Lo hemos visto bastante maduro con sus 18 años. Tiene muchas cosas para mejorar y seguiremos su evolución”, asegura el Cholo en el comienzo del curso.

Giovanni ya es un jugador hecho. A los 26 años disfruta de la madurez futbolística y quizá haya llegado el momento de volver a encontrarse con la familia.