Un juego peligroso

El Barça logra un triunfo importante, pero sestea en exceso y Las Palmas roza el empate.

«Estos partidos son los que dan ligas», reflexiona Luis Suárez. Tan cierto como lo que dijo Luis Enrique: «Me voy con la sensación de que debemos mejorar cosas». Porque otra vez el líder pasó un mal rato lejos de su estadio y jugó un partido tirando a malo, pero de nuevo ganó, gracias en esta ocasión a Luis Suárez, un futbolista cuya actuación tiene dos lecturas. Marcó el 0-1 y protagonizó la jugada, partiendo seguramente en fuera de juego, del tanto definitivo que remachó Neymar. Pero también desperdició oportunidades clarísimas que hubieran permitido al Barça justificar mejor su segunda parte y no pasar el sofocón que se llevó en los instantes finales. Porque con 1-2, tras el descanso, el conjunto de Luis Enrique se dedicó a intentar mantener la posesión y a que pasaran los minutos, y lo logró durante un rato largo, pero con el marcador tan ajustado eso es un riesgo. Apretó de nuevo Las Palmas en el último cuarto de hora y los dos disparos de Araújo se marcharon rozando el palo, acariciándolo casi, mientras Luis Enrique estaba al borde del pánico en el banquillo. Y eso que todo había comenzado bien para los suyos, porque Iniesta no tardó en filtrar un pase a Jordi Alba. El lateral sorprendió y sirvió a placer el gol a Suárez, que esta vez no perdonó. De nuevo se ponía el Barcelona por delante pronto y le empataron, como ya le pasara contra el Málaga o contra el Sporting. Las Palmas trató de presionar arriba y volvió a complicar al líder. Además, con una apuesta valiente y jugadores de calidad, no le quemaba la pelota. Sabe jugar el balón el conjunto amarillo y tuvo posesiones largas, algo a lo que no está acostumbrado a enfrentarse su rival de ayer. También tuvo alguna contra si el Barça se precipitaba en la elaboración. Cuando el equipo azulgrana busca los pases largos y lo hace mal se descoloca en la presión y le superan las líneas con facilidad. En cambio, cuando hace lo de la segunda mitad, está más ordenado alrededor del esférico y lo recupera nada más perderlo.

Apenas cinco minutos tardó Willian José en igualar el tanto de Suárez, tras partir en posición legal y después de un espectacular pase de tacón de Jonathan Viera. El duelo se convirtió entonces en un alboroto. Incomodados por el viento y por el césped, se cometían errores de cálculo infantiles, fallos en los pases e imprecisiones, hasta que Neymar acertó al finalizar una acción que había empezado Suárez. El uruguayo se desmarcó al filo y lo hizo todo perfecto. Primero remató Messi, y paró Varas, pero el portero nada pudo hacer ante el rechace de Neymar.

El rondo de la segunda parte a punto estuvo de salirle mal al Barcelona. Messi sacó la calculadora y se movió lo justo, mientras Neymar se enredaba en sus regates. No fue el día del «10», que mostró su falta de tensión en una contra clara en la que le ganaron fácilmente el terreno. Esa jugada le hizo reaccionar y se activó, aunque sólo fuera los cinco últimos minutos, después de que Suárez hubiera fallado la sentencia y de que Las Palmas ya hubiera dado sus sustos.

El Barça, que lleva todo 2016 jugando dos partidos por semana, parece perezoso ante duelos como el de ayer. Pero mientras espera a las jornadas calientes de la Liga y la Liga de Campeones sigue ganando.

- Ficha técnica:

1. UD Las Palmas: Javi Varas; David García (Nili, min. 87), Aythami, Bigas, Garrido; Roque; El Zhar (Araujo, min. 76), Tana, Jonathan Viera (Lemos, min. 66), Momo; y Willian José.

2. FC Barcelona: Bravo; Alves, Mascherano, Mathieu, Alba; Arda (Rakitic, min. 46), Sergi Roberto (Vermaelen, min. 70), Iniesta; Messi, Suárez y Neymar.

Goles: 0-1, min. 6: Suárez. 1-1, min. 10: Willian José. 1-2, min. 39: Neymar.

Árbitro: Carlos Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Mostró tarjeta amarilla al jugador local Roque (min. 84) y a los visitantes Arda (min. 33) y Alves (min. 86).

Incidencias: partido disputado este sábado en el Estadio de Gran Canaria ante 26.951 espectadores (83 por ciento del aforo). Realizó el saque de honor Paula Miranda, Reina del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria 2016. Se guardó un minuto de silencio en memoria del padre de Zeljko Cicovic, entrenador de porteros del club local.

Rodrigo García/Efe