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Roger Martí: “Ronaldo siempre ha sido mi referente”

El delantero del Levante, se fijaba en el brasileño cuando era pequeño. Ahora vive su mejor momento después de una lesión de ligamentos y es la principal amenaza de su equipo contra el Barcelona

Roger Martí ha marcado ya ocho goles/Foto: Gtres
Roger Martí ha marcado ya ocho goles/Foto: Gtreslarazon

Roger Martí , delantero del Levante, se fijaba en Ronaldo cuando era pequeño. Ahora vive su mejor momento después de una lesión de ligamentos y es la principal amenaza de su equipo contra el Barcelona

Roger Martí (Torrente, 1991) atiende a LA RAZÓN después del entrenamiento del jueves. Antes de que el sorteo emparejara a su Levante con el Barcelona, el mismo equipo ante el que se enfrenta el domingo por la noche (20:45). “Es un partido muy motivante. Tengo muchas ganas de jugarlo. En casa contra los mejores del mundo. Vamos a intentar hacer un partido perfecto y que ellos no tengan su día. Nosotros, con nuestras armas a hacer lo que estamos haciendo y con un poquito de suerte, que nunca viene mal”, dice el delantero levantinista. Roger, a punto de cumplir los 28 años, se encuentra en el mejor momento de su carrera. Igual que su equipo, que cierra con su sexta plaza el grupo de equipos clasificados para competiciones europeas. El delantero reconoce el gran trabajo que está haciendo Paco López desde que llegó al banquillo la temporada pasada -“conoce muy bien el club”, dice- pero ni él sus compañeros pierden la perspectiva. “El objetivo es asegurar la permanencia cuanto antes”, asume.

Ha marcado ya ocho goles esta temporada en Liga. Goles que nacen del trabajo y el sacrificio que hizo después de romperse los ligamentos de la rodilla la temporada pasada. Era la segunda vez que le sucedía. La primera ocurrió en Valladolid, donde jugaba cedido por el Levante. El Valladolid acababa de descender y Roger era la esperanza para el gol que devolviera al equipo blanquivioleta a Primera. “Pude recuperarme para jugar los últimos partidos, el playoff de ascenso, pero lamentablemente no pudimos ascender”, recuerda. Antes ya había estado cedido en el Zaragoza en unas circunstancias parecidas, también recién descendido. El Zaragoza le hizo reconocerse entre la élite. “Me aportaron mucha madurez”, dice de esas dos cesiones.

Cuando se lesionó en Valladolid encontró su referencia en Diego Costa, delantero como él y que había pasado por la misma lesión antes de regresar a la máxima competición con su cesión al Rayo. “Me fijaba en él, que volvió y no le tiene miedo a nada”, afirma. Cuando la temporada pasada se rompió por segunda vez, ya no tenía que buscar referencias externas. “Tenía mi propia experiencia”, reconoce. Pero esa experiencia sí le ayuda para ponerse en el lugar de otros. En un partido de pretemporada tuvo un recuerdo para su compañero Sadiku, que acababa de sufrir la misma lesión. “Cuando has pasado por eso sabes lo jodido que es e intento apoyar a los compañeros a los que les ha pasado. Es una putada, pero con una buena recuperación se vuelve igual”, dice.

Él es la mejor prueba. Su pasión por el trabajo físico le ayudó a regresar a su mejor nivel. Mejor incluso que antes de lesionarse. Cada tarde trabaja con un entrenador personal. “Empecé con él hace dos años”, dice. Antes de la rotura de ligamentos. Y no le supone ningún conflicto con el club. Al contrario. “Es trabajo complementario, no hago carga ni nada de eso. Con el equipo hacemos un trabajo colectivo y en el gimnasio trabajo lo que no da tiempo a trabajar en el entrenamiento”. Eso le permite ser siempre uno de los mejores en los pruebas físicas del equipo. Dicen los que le conocen que las medidas que recoge el club de su rendimiento en los entrenamientos son prácticamente idénticas a las que recoge en los partidos. Una simulación perfecta.

Pero la pasión por el gimnasio de Roger le viene de antes. Aprovechó la primera lesión de ligamentos para montar un gimnasio junto a otros dos socios, amigos suyos los dos. “Me gusta”, dice. Además, le ayudaba a no centrar todos sus pensamientos en la lesión que le impedía jugar al fútbol durante esos meses. El gimnasio que puso en Torrente, como lo dice él, sigue funcionando. Y ofrece más servicios, como tratamientos de fisioterapia.

Sin embargo, su ídolo de juventud no destacaba por su implicación en el trabajo físico. “Ronaldo Nazario para mí siempre ha sido un referente. Me gustaba muchísimo y ahora me gustan mucho [Luis] Suárez, Diego Costa. Son delanteros del perfil que me gusta exponer en el campo y me fijo bastante en ellos”, reconoce.

Roger firmó su renovación por cinco años con el Levante hace unos meses y no se plantea lo que pasará con su futuro después de esta temporada. “En el fútbol nunca se sabe, pero tengo la cabeza aquí en hacer un buen año”, afirma.