Restringido

Hace falta disciplina

La Razón
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La llegada de Rafa Benítez al banquillo del Real Madrid ha originado un agrio debate periodístico. Y, por otro lado, un mar de dudas en el vestuario por su forma de ser y su rigidez en el trabajo diario. El técnico no es de los que suelen transigir ante futbolistas que se acomoden, como se ha demostrado que ha ocurrido en ese vestuario en el último año con las consecuencias por todos conocidas de no ganar ningún título de los tres grandes, Champions, Liga y Copa del Rey.

Hubo dejadez

Yo creo que la falta de orden y disciplina y cierta dejadez en algunos meses decisivos, ha llevado a que el presidente tomara la difícil decisión de prescindir de un hombre muy querido en lo personal, aunque la ley del fútbol dictó sentencia y condenó a Carlo Ancelotti a abandonar el banquillo merengue por no conseguir lo que es tan importante para una sociedad como la del Madrid, ganar títulos todos los años. Lo mismo que le puede ocurrir a Rafa Benítez si no consigue los objetivos para los que ha sido contratado, entre otras cosas poner disciplina a un vestuario donde ha vivido en los últimos meses con una autogestión y anarquía que no ha gustado en la planta noble.

Todos de la mano

No sabemos cómo se comportará el balón, pero lo que tengo claro, como ya dije en «El Chiringuito de Jugones» el martes se acabó la autogestión para dar entrada a la disciplina en un grupo que necesita un nuevo rumbo. Porque mientras la directiva pone toda la carne en el asador para conseguir una gestión que está a la altura de los mejores, es obligado que sobre el terreno de juego vayan también de la mano técnicos y jugadores.