Mucho fútbol, ningún gol

No se separaron Sevilla y Villarreal en su duelo de la segunda jornada de Liga, que sirvió para que los amarillos sumasen su primer punto y para que los sevillistas añorasen a un delantero centro eficiente, cegada la puntería de André Silva en Vallecas.

No se separaron Sevilla y Villarreal en su duelo de la segunda jornada de Liga, que sirvió para que los amarillos sumasen su primer punto y para que los sevillistas añorasen a un delantero centro eficiente, cegada la puntería de André Silva en Vallecas. El ariete portugués disfrutó de las mejores ocasiones del encuentro pero no pudo con un Asenjo heroico, decisivo en que su equipo saliese indemne del Sánchez Pizjuán. Porque aunque es cierto que también los castellonenses tuvieron sus opciones, y Vaclik mostró la firmeza que debe tener un portero de tronío, el encuentro estuvo dominado por los locales.

Ciertos empates a cero desmerecen esa condición, porque se producen al término de partidos preñados de ocasiones. El Villarreal, que es un perenne aspirante a Europa, pudo ganar en el campo de un igual pero, sobre todo, el Sevilla mereció tres puntos ante un rival directo que resistió gracias a Asenjo y a la mala puntería de Sarabia y André Silva, los dos goleadores que le alegran los pajarillos a Pablo Machín mientras le contratan al delantero que pide a voces. Tiene a uno, Ben Yedder, que acredita con hechos su capacidad goleadora aunque resulta atípico y feo de ver. Le dio diez minutos que estuvo a punto de aprovechar con un remate al palo en el 90, la última gran ocasión del encuentro.

Roque Mesa, con un remate de media distancia, marcó el tono del encuentro casi desde el arranque: el Sevilla sería martillo y al Villarreal le tocaría ser yunque. El centrocampista canario forma una collera interesante con Banega, si bien la entrada de Gonalons por el argentino, a falta de media hora, le dio al equipo un empaque físico del que carecen los dos mediocentros (por ahora) titulares. Al son de sus dos directores, bailaban los de Machín, con el juego por las bandas más equilibrado que en otras ocasiones porque Escudero se mostraba más entonado que Navas. Los de Calleja estaban agazapados con todas sus flechas en el carcaj, a la espera de lanzar contras como la que Toko Ekambi estuvo a punto de culminar aunque apareció, providencial, Vaclik.

En la segunda parte, los visitantes quisieron mantener la dinámica con la que acabaron la primera y pronto se acercaron con peligro al área local ante un rival que pareció más desgastado físicamente. Vaclik salvó el 0-1 en un remate del delantero colombiano Carlos Bacca poco después de que el exsevillista hubiera ingresado al terreno, y eso dio una idea de que el Villarreal estaba más fresco física y mentalmente. En la fase final del choque, y con el obligado cambio de Sergio Escudero por una grave lesión de codo que sufrió en un lance del encuentro, pudo pasar de todo y a favor del Sevilla, con una muy clara de André Silva en el minuto 89 y otra de Ben Yedder, con remate al palo en el 90, pero el marcador no se movió.