Tamara Gómez: «El que hace un triatlón, se engancha»

Llueve en Madrid. Hace un día de perros, pero Tamara Gómez habla antes de ir a la piscina, a una de las tres sesiones de entrenamiento diarias que tiene toda la semana menos los viernes, en los que «descansa» con sólo una sesión suave. Los días que tiene gimnasio, la cita con el sufrimiento sube de tres a cuatro veces. «En ocasiones sí que te levantas y te duelen las piernas, los brazos... Miras por la ventana y está lloviendo y dices: “Buff, qué necesidad”. Pero luego compensa», reconoce esta triatleta de Elche que empezó nadando de pequeñita «en plan tu madre te apunta para que aprendas», que se animó a correr algunos crosses y entonces la tentaron con el triatlón. «Hice una prueba de tiempos, me salió bien y al año siguiente estaba en la Blume. Nunca había hecho triatlón, no tenía ni bici», asegura Tamara, que se enganchó como muchos otros en España. «Está creciendo. Ayuda que tenemos al número uno, Gómez Noya, al dos, Mario Mola, y a Fernando Alarza (5) y Vicente Hernández (15). Es divertido porque es dinámico. No sé por qué, pero el que hace un triatlón, se engancha», narra Tamara, que pasa temporadas en la Residencia Blume de Madrid, compitiendo por el mundo o entrenando en el grupo de Gómez Noya, al que se ha integrado este año.

Pese a que empezó nadando, ésa es la especialidad que más se le atraganta ahora. «La primera boya está a 250 metros, somos 60 personas y todas queremos pasar por el mismo sitio. Entonces hay golpes, agarrones... es un poco boxeo», describe uno de los segmentos del triatlón. Después viene montar en bicicleta y correr. Tres especialidades para las que se utilizan músculos diferentes. «Es un poco difícil estar bien en las tres. Cuando estás bien corriendo es cuando estás delgado, y para nadar hace falta estar más grande arriba. Hay que encontrar el equilibrio», continúa Tamara, que tiene la carrera de veterinaria apartada, pero en mente. «Este año no he podido compaginarlo porque quiero ir a los Juegos», afirma. Ahora es la tres nacional, y España, de momento, cuenta con dos plazas para Río, aunque podría ganarse otra. En marzo conquistó su primera prueba de la Copa del Mundo, en Mooloolaba. «Si no fuera por Becas Podium no podría estar dedicándome al cien por cien al triatlón, porque algunas carreras las paga la Federación, pero otras las pagamos nosotros (una de ellas, la que ganó). Es un dinero importante: viaje, hotel... Es difícil encontrar patrocinadores. Diría que no vivo del triatlón, vivo para el triatlón», explica uno de los cuatro triatletas de Podium. Los otros son Fernando Alarza, Vicente Hernández y Miriam Casillas, que acaba de ser tercera en la Copa del Mundo de Alanya, prueba en la que Tamara tuvo que abandonar por una lesión que se quedó en un susto. Ella ya sabe lo que es pasarlo mal en ese sentido porque en 2014 encadenó una molestia tras otra: «Me enseñó a tener paciencia y a darme cuenta de que me encantaba esto y de que quería ir a los Juegos».

Triatlón

- 19.884 licencias en España

- 1 plata Logró Gómez Noya en Londres 2012. Es favorito al oro en Río. Aparte, España ha sumado otros cinco diplomas en un deporte que es olímpico desde Sidney 2000

- ¿Sabías que? La distancia olímpica son 1,5 km nadando, 40 en bicicleta y 10 corriendo, pero las pruebas extremas, las «ironman», llegan hasta 3,86 km de natación, 180 km de ciclismo y 42,2 km (una maratón) de carrera