Tenis

El cabreo de Djokovic con el juez de silla por un punto extrañísimo contra Nardi en Indian Wells

El sorprendente italiano Luca Nardi dio la campanada en Indian Wells al eliminar al número uno del mundo

Luca Nardi, of Italy, talks with Novak Djokovic, of Serbia, after upsetting Djokovic at the BNP Paribas Open tennis tournament Monday, March 11, 2024, in Indian Wells, Calif. Nardi won 6-4, 3-6, 6-3. (AP Photo/Mark J. Terrill)
Indian Wells TennisASSOCIATED PRESSAgencia AP

Novak Djokovicperdió en Indian Wells contra el 123 del mundo, el italiano Luca Nardi (6-4, 3-6 y 6-3). Fue el sorpresón del primer Masters 1.000 del año, en un partido en el que además se vivió una situación extraña que terminó con la discusión del número uno del mundo con el árbitro. Sacó Djokovic y Nardi golpea la bola con poco convencimiento, como si hubiera visto el servicio fuera, pero no para el punto ni nada, se detiene él y hace una dejada. El serbio llega a la misma y hace una contra, a la que corre el italiano para pasar al cinco veces ganador en el torneo californiano, que en ese momento ya se había parado también y empezaba su protesta contra el juez de silla, el estadounidense Greg Allensworth.

“Golpeó la pelota y se para”, dice Djokovic después de estar mirando un rato al árbitro con los brazos abiertos. “Que él se pare no quiere decir que el punto pare”, le contesta Allensworth. “¿Pero de qué estás hablando? Viste la reacción”, le insiste el tenista serbio. “Él se para y me confunde completamente. ¿Cómo puedes no juzgar eso?”, prosigue Nole. “¿Me estás pidiendo que señale hindrance? [se sanciona con un punto perdido si un tenista hace gestos o grita antes de que el rival vaya a golpear]”, le pregunta el juez. Djokovic imita la acción que hizo Nardi. La conversación continúa un rato más y Allensworth reconoció que entendía lo que le decía, pero que no era suficiente para señalar hindrance.

Novak se acaba sentando en la silla, sin estar demasiado conforme. Era break de su oponente, que se ponía 2-1 abajo en ese parcial, después de haber ganado el primer set. Curiosamente, o no tanto, porque pasa muchas veces, que estas situaciones no descolocan al serbio, a partir de ahí Djokovic tomó el control del encuentro, pero en el tercer set volvió a ser sorprendido por el italiano de 20 años, que apenas podía creer lo que acababa de conseguir.

Nardi consideró casi un milagro el triunfo y admitió que tenía posters de Djokovic en su habitación. Djokovic aseguró que había tenido una actuación mala y que no es habitual llegar a estas alturas de la temporada sin tener ya un título ganado, pero que eso es el deporte y que le hará ir todavía con más ganas a las siguientes citas. La próxima parada es Miami.

A Nardi, por cierto, le preguntaron después por Tommy Paul, su próximo rival, y respondió sorprendido que no tenía ni idea de que se enfrentaba a él, que no había mirado el cuadro.