Australia

Djokovic juega a otra cosa

El serbio ratifica en Australia ante Murray que su dominio del circuito es incontestable. Ha ganado diez de los últimos 21 «Grandes». Roland Garros y el oro olímpico, sus obsesiones

Djokovic celebra su triunfo
Djokovic celebra su triunfolarazon

El serbio ratifica en Australia ante Murray que su dominio del circuito es incontestable. Ha ganado diez de los últimos 21 «Grandes». Roland Garros y el oro olímpico, sus obsesiones

La guerra de Novak Djokovic hoy no es con Murray, Federer, Nadal o Raonic. El serbio está a otra cosa, como confirmó en la final del Abierto de Australia. Atropelló a Murray por 6-1, 7-5 y 7-6 (7/3) en dos horas y 53 minutos. ¿Hasta dónde «Nole»?

- El serbio y la historia

Los números son apabullantes. Las declaraciones de sus rivales, también. «No he visto jugar a nadie al tenis así», dijo Nadal tras caer en la final de Doha. «Sólo hay que esperar a dejar de sangrar», afirmó Federer tras caer en la semifinal en Melbourne y ser vapuleado en los dos primeros sets. «No he podido hacer nada», confesó Murray. Djokovic lo ratificó: «En los últimos 15 meses estoy jugando el mejor tenis de mi vida. Traducción: acumula 11 «Grandes» –ver cifras–, ha ganado 94 de los últimos 100 partidos, lleva 183 semanas como número uno –sólo tiene por delante a Federer, Sampras, Lendl y Connors–... Y tiene 28 años.

- Amo de Melbourne

Djokovic está camino de establecer una dictadura en Australia, como la de Nadal en París o la de Federer en Wimbledon. Acumula seis títulos en Melbourne, los mismos que el australiano Roy Emerson. No ha fallado en ninguna de las media docena de finales que ha jugado. El único partido en el que ha tenido problemas en esta edición fue en el duelo de octavos con Gilles Simon. Se fue a cinco sets «gracias» a un centenar de errores no forzados.

- El «Grand Slam» y Río

«Si gana en Australia, Djokovic logrará el ‘‘Grand Slam’’ este año». La frase la pronunció Mats Wilander antes de arrancar el torneo de Melbourne y el serbio ya ha cumplido con la primera misión. Ha ganado cuatro de los últimos cinco «Grandes» y sólo falló en la última final de París ante Wawrinka. Ése es su gran desafío. La arcilla roja de Roland Garros y el oro olímpico en Río son sus dos grandes obsesiones de la temporada... Y acercarse lo más posible a los 17 «Majors» de Federer.

- La no final de Murray

Al escocés no le ayudaron las circunstancias. Ha pasado el torneo pendiente de su inminente paternidad y estuvo a punto de abandonar por el desfallecimiento de su suegro –el entrenador de Ana Ivanovic– en pleno partido. Acumuló casi tres horas más en pista que Djokovic entre los cuartos (Ferrer) y la semifinal (Raonic) y, para colmo, tuvo 24 horas menos de descanso. Su «incomparecencia» en el primer set, sus gestos desquiciados al palco... El campeón olímpico y de dos «Grandes» no estuvo en la final. «Creo que ya he estado alguna vez aquí», soltó en la entrega de trofeos. Murray ha perdido cinco finales en Australia y cuatro de ellas (2011, 2013, 2015 y 2016), ante «Nole».