Diana Navarro: «El palomo no se busca, se encuentra»

–Canta género chico y el disco se llama «Género chica». ¿Cumple órdenes feministas?

–Yo no cumplo órdenes de nadie, soy muy mía.

–¿Y por qué le dio por la zarzuela esta vez?

–La descubrí tarde, en el 2008, pero con entusiasmo. Con la copla y el flamenco, es el otro género grande de España. Así cierro mi trilogía.

–Canta «La paloma», de «El barberillo de Lavapiés». ¿Busca palomo?

–El palomo no se busca, se encuentra.

–«Guajiras», de «La Revoltosa». ¿Qué pasa cuando un moreno clava sus ojazos en los suyos?

–«Que todo el cuerpo se me enciende y se me pierde el sentío...».

–«Tango de la Menegilda», de «La Gran Vía». «Pobre chica, la que tiene que servir...». ¿Ha aprendido a sisar?

–No. Yo sólo siso cariño; dinero, nunca. No recuerdo haber robado.

–Por cierto, ¿quién sisa mejor en este país?

–Dicen que la cosa está muy repartida, pero ¿quién soy yo para juzgar a nadie?

–«La tarántula», de «La Tempranica». ¿De qué veneno huye?

–Del veneno de la cólera. Cuando monto en cólera, luego pido humildemente perdón.

–«Mira lo que te has perdío». ¿Qué se pierden los hombres cobardes?

–Muchas cosas. Mujeres de verdad, mujeres reales.

–«Carceleras», de «Los hijos de Zebedeo». ¿De quién le gustaría ser carcelera?

–De nadie. En el amor, se mantiene lo que no se retiene.

–«Romanza de la rosa», de «El rey que rabió». ¿Los que regalan rosas son unos capullos?

–No, son generosos. Hay rosas que yo valoro más que un diamante.

–«La Gitana», de «La chavala». ¿Qué quisiera tener de los gitanos?

–La sabiduría popular y el soniquete para cantar por bulerías.

–Dedicatoria del disco: «A ti, que con tu luz has llenado mi oscuridad».

–No me diga que no me ha quedado bonito. Se lo digo a mi amor.

–Pensé que se declaraba a Iberdrola, Endesa y Fenosa...