Nueva factura de la luz

Los consumidores pagan ya 110 euros más que el pasado año en el recibo de la luz

Factura inaudita para el mes de agosto de 76,6 euros de media, según las previsiones de la OCU

Líneas Eléctricas de Alta Tensión en Rubí
Líneas Eléctricas de Alta Tensión en RubíEUROPA PRESSEUROPA PRESS

La ligera tregua del mercurio ha logrado atenuar la escalada de los precios de la electricidad en el mercado mayorista. Sin embargo, tras dos sesiones de bajadas, el megavatio hora vuelve a subir. De los 88,92 euros por MWh de media marcados para hoy, el precio medio diario de la electricidad repunta mañana un 0,65%. Se mantendrá, eso sí, por debajo de la cota de los 90 euros MWh y alejado de los récords históricos que encadenó a lo largo de la pasada semana, con un pico de 117,3 euros MWh. En concreto, el «pool» eléctrico registrará un precio medio de 89,50 euros MWh, su cuarto nivel más bajo en lo que llevamos de agosto, según datos del operador OMIE. El máximo a lo largo del martes se tocará entre las 22:00 horas y las 23:00 horas, con 120 euros el MWh, y el mínimo, de 82,09 euros el MWh, se registrará entre las 5:00 y 6:00 de la mañana.

Los guarismos siguen siendo de vértigo, con unos precios un 130% superiores a los de las mismas fechas de hace un año, cuando rondaban los 38 euros el megavatio hora.

La espiral alcista de la pasada semana disparó las alarmas en el Gobierno ante el aluvión de críticas de la oposición y la preocupación creciente de las organizaciones de consumidores, empresariales y del propio sector eléctrico, afectado también por los altos precios del gas natural para la generación.

Sin margen de reacción, el Gobierno abrió la puerta a crear una empresa pública energética, tal y como viene desde hace tiempo pidiendo su socio en el Ejecutivo, Unidas Podemos, una estrategia que no serviría de nada para abaratar la generación eléctrica y que, más bien, supondría un sobrecoste innecesario a las arcas públicas, según fuentes del sector consultadas por este diario.

El sector eléctrico remarca que las alzas están motivadas exclusivamente a factores ajenos. El primero de ellos es estrictamente político, ya que el coste de los derechos de emisión de CO2 está directamente relacionado con la decisión de la Unión Europea de restringir dichas emisiones, lo que ha encarecido esos derechos hasta superar en lo que va de agosto los 55 euros por tonelada, cuando a principios de año cotizaban en torno a los 33 euros. Además, el precio del gas natural, necesario para generar electricidad con la tecnología de ciclos combinados, la que habitualmente marca el precio medio de la luz, repunta ya por encima de los 45 euros el MWh, según datos del operador Mibgas.

El precio de la energía supone una cuarta parte del recibo final, pero ante la escalada de precios el Gobierno se vio empujado el pasado 24 de junio a bajar el IVA de la luz del 21% al 10% hasta finales de este año y a suspender del impuesto del 7% a la generación eléctrica, que pagan las compañías y se repercute en el precio, durante tres meses.

Pero ni siquiera eso ha servido. La factura de la luz en agosto costará de media 76,6 euros si se mantienen los precios elevados, lo que supone un 4,4% más que la factura récord de julio y un 35% de incremento (20 euros más por consumo equivalente) frente a la factura de agosto de 2020, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). La OCU advierte del efecto que la subida del precio de la electricidad durante el mes de agosto va a tener en la factura de los consumidores, y que según sus cálculos supondrá un incremento del 25% anual en la factura hasta agosto. Esta fuerte alza impulsa también el indicador del IPC y con ello las revalorizaciones de prestaciones vinculadas, como las pensiones.

La OCU indica que la factura acumulada durante estos primeros meses de 2021 será de 546,25 euros, frente a los 437,85 euros que se pagaron el pasado año 2020 hasta el mes de agosto. Se trata de un sobrecoste de 108,4 euros, lo que significa que, hasta el momento, los consumidores han pagado por la factura de la luz un 24,8% más que en 2020.

Ante lo que pueda venir en invierno, el Gobierno elevará la obligación de mantenimiento de existencias de gas natural licuado (GNL) para el mes de enero a 4,5 días de consumo, frente a los 3,5 días anteriores por la previsión de una situación de tensión en los precios del gas natural como la vivida a principios de este año en plena ola de frío por Filomena.