Tecnología

El éxito de las scaleups españolas abre el apetito inversor

Nuestras tecnológicas han captado este año 1.900 millones de euros. El valor del sector se ha multiplicado por cinco desde 2015

Startups
StartupsJosé Luis Montoro

El crecimiento de florecientes ecosistemas tecnológicos en España está atrayendo la atención de inversores no solo de nuestro país, también internacionales, sobre todo europeos. En el primer semestre de 2021, la inversión de capital riesgo en las startups españolas creció más rápido que en cualquier otro país de Europa hasta los 1.900 millones de euros. No es de extrañar que atraigamos más capital extranjero. Desde el año 2015 hasta ahora, el valor de las startups en España se ha multiplicado por cinco. De unos 10.000 millones de euros a 46.000 millones, en los que ya se cuenta con una pequeña lista de unicornios españoles como Flyware, Glovo, Wallbox (la próxima empresa cotizada), Cabify o Letgo, ocupando el puesto quinto de potenciales unicornios en el ranking europeo, según el informe sobre el estado del ecosistema tecnológico español en 2021 presentado por el Alto Comisionado de España Nación Emprendedora.

A ellos se unen, según sus datos, más de 300 empresas tecnológicas con una valoración de 24.000 millones de euros en España y que por tanto son ya consideradas scaleups. Las scaleups son startups que han crecido durante los tres últimos ejercicios a un ritmo anual superior al 20% en número de empleados y facturación. Son, por tanto, empresas tecnológicas que han logrado evolucionar y crecer hacia una dimensión de mayor impacto económico y social con más de un millón de euros en facturación. En 2020 su facturación alcanzó los 1.660 millones de euros, cifra que en 2021 se prevé que vaya a incrementarse en un 90,6% hasta los 3.164 millones de euros, según el informe el impacto de las scaleups en la economía española de la Fundación Innovación Bankinter, Endeavor y Wayra. Por su importancia son también las que ocupan la mayor parte de la atención de los fondos tanto nacionales como internacionales.

Si España venía de un ecosistema basado en el capital semilla, ahora son las Series B, C y megarondas las que marcan la tendencia. De hecho, si el 33% de las operaciones de 2020 fueron Series A (las más numerosas), el 31% que ocupa las megarondas de 2021 supera todas las previsiones. Le siguen las operaciones de 40.000 euros de inversión e incluso crecen las megarondas.

Las rondas de financiación de este tipo de compañías siguen siendo de vital importancia. Hasta ahora la mayor parte del capital proviene de España, con el 45%, seguido del 27% europeo, un 16% estadounidense, 5% asiático y 7% residual de otros países. Pero las scaleups españolas quieren evolucionar hacia un modelo de financiación más internacional, que ponga el foco especialmente en Estados Unidos. «En Europa hay mucho dinero e interés por invertir en empresas tecnológicas. Los fondos de capital riesgo buscan oportunidades en fases semilla, uno de los primeros estadios de una startup, o en fases muy maduras», explica Jordi Ferrer, CEO y fundador de Zinklar. Esta startup, que cuenta ya con cuatro años de vida, proporciona a las marcas información sobre los consumidores en tiempo real para ayudarles a tomar las mejores decisiones para crecer. En 2021 facturó cuatro millones de euros, tiene 50 empleados y 200 marcas en todo el mundo como Heineken, Hovis o Reckitt usan su plataforma. «Lo más complicado y crítico para escalar es hacerlo a nivel internacional y eso es algo en lo que hay que pensar desde el minuto cero de la compañía. Porque ejecutarlo luego es muy difícil», explica el CEO de Zinklar.

Gabor Balogh, cofundador de de la compañía española Trucksters, señala que lo más difícil de una startup para escalar es encontrar el «Product Market Fit». Este concepto traído de Silicon Valley (California), la sede de muchas compañías emergentes y globales tecnológicas, es el proceso mediante el cual una empresa define cuál será su público objetivo y estima la demanda que tendrá en un mercado concreto. Trucksters es un operador de transporte que se centra en proporcionar un servicio de transporte de larga distancia FTL a través de un innovador sistema de relevo basado en Big Data e Inteligencia Artificial. «Con nuestra tecnología planificamos rutas», explica Balogh. Creada en 2018 por Luis Bardají, Gabor Balogh y Ramón Castro, el objetivo de Trucksters es lograr que la industria mundial del transporte de mercancías por carretera sea más eficiente y digna para los profesionales del sector. Para 2022 esperan tener 300 camiones rodando en Europa y abrir nuevas rutas como en Reino Unido o Italia. Al igual que Jordi Ferrer, Gabor Balogh sostiene que en Europa hay muchas ganas de invertir. «Lo más difícil es atraer al primer inversor, alguien que valide que tu modelo de negocio funciona», asegura.

La clave para lograr sobrevivir y escalar está en crecer muy rápido, comenta Josep Coll, CEO y fundador de la startup RepScan. «Nos movemos con gasolina privada y tenemos que multiplicar por dos nuestra facturación anual para sobrevivir». Esta startup, que ayuda a las personas en cualquier parte del mundo a detectar y eliminar el contenido negativo que se encuentra en internet con el uso de la mejor tecnología, tiene ocho meses de vida, pero ya ha conseguido ser rentable. Acaba de cerrar una primera ronda de financiación de 1,2 millones de euros. Cuenta ya con diez empleados y en un futuro cercano quieren ser una scaleup. España, dice Coll, «es el mejor país para conseguirlo. Tenemos el mejor talento». De momento van por buen camino. Acaban de recibir el premio al «Servicio más innovador» en la gala «Premio Talent Cambra 2021».

Capchase es otra scaleup española. Fundada a mediados de 2020, se ha consolidado como una alternativa al Venture Capital y a la deuda tradicional para las compañías de SaaS (Software as a Service) . Desde su lanzamiento Capchase ha habilitado más de 390 millones de dólares en financiación y más de 400 empresas utilizan ya su plataforma en los países donde operan, principalmente EE UU y Reino Unido. La empresa espera crecer un 400% en los próximos seis meses. Capchase anuncia también su expansión europea con su servicio ahora disponible para las empresas en Reino Unido y España. Ignacio Moreno, uno de los fundadores de esta startup, explica que no es lo mismo escalar que crecer. «Crecer es relativamente fácil y escalar es crecer de manera sana, no de manera caótica y eso es lo más complicado. Por tanto hay tener un plan y un proceso». Capchase ha pasado de contar con 15 empleados a 80 en todo el mundo en solo un año. «Ojalá hubiera más scaleup. La clave está en que las compañías españolas se abran al mercado extranjero y si eres capaz de abrirte al mercado americano, se te abre un mundo más grande», explica Ignacio Moreno.

FASES DE CRECIMIENTO DE UNA SCALEUP
Las scaleups, startups que han logrado evolucionar y crecer hacia una dimensión de mayor impacto económico y social con más de un millón de euros de facturación, cuentan a su vez con tres fases de crecimiento:
Scaler: más de un millón de euros de facturación.
Growth: más de 10 millones de euros de facturación.
Rocket: más de 50 millones de facturación. Conforme logran avanzar en su viaje por estas fases, su facturación experimenta un pico, llegando a multiplicarse por 7,2 en el salto entre scaler y growth, y por 10,7 en el paso de growth a rocket.