Alquiler

¿Cómo puedo protegerme de un inquilino moroso?

Los arrendatarios tienen que destinar en algunos casos la mitad de sus ingresos para pagar la renta

Viviendas en alquiler en Madrid
Viviendas en alquiler en MadridJesús G. FeriaLa Razón

La situación económica actual está encareciendo cada vez más la vida haciendo que los ciudadanos lo noten en sus bolsillos, los cuáles están viendo su poder adquisitivo disminuir a pasos agigantados. A la lista de factores que agravan esta problemática se suma el precio elevado de la electricidad, una inflación cada vez más disparada y un mercado del alquiler que se está recalentando poco a poco.

En este sentido, el mercado actual se caracteriza por un número menor de pisos disponibles para alquilar y aún más caros, haciendo que en algunos casos, los inquilinos tengan que dedicar la mitad de sus ingresos para pagar la renta, colocando en una situación delicada a aquellas familias que tienen menos ingresos. Por tanto, pese a que la vivienda es lo último que dejan de pagar los ciudadanos cuando se enfrentan a problemas económicos, algunas circunstancias propician que esto se dé con mayor asiduidad, haciendo que los impagos aumenten considerablemente. En este contexto, no es de extrañar que los inquilinos morosos se hayan extendido en el mercado del alquiler, lo que supone un grave problema para los propietarios de las viviendas.

Pero, ¿cómo puede evitar un propietario verse ante esta situación? La protección más eficaz es que se realice un estudio previo del perfil del candidato al que se vaya a arrendar una casa. Para ello se puede consultar el fichero de morosos del alquiler para recabar información sobre esta persona y comprobar si dispone de alguna deuda ya sea con otro propietario o entidades. En este sentido, las agencias inmobiliarias, propietarios, aseguradoras y registros suben esta información a la base de datos para evitar que queden impunes estos actos.

En esta situación, si el inquilino aparece en el listado de morosos del alquiler esto resulta un claro indicador del riesgo que supondría el arrendar la vivienda a dicho candidato. Sumado esto, otra herramienta para evitar a este tipo de personas es contratar un seguro de impago de alquiler, el cual tiene un coste de entre el 3% y 5% de la renta anual, ya que de esta forma, la aseguradora hace una criba entre los candidatos para otorgar la vivienda al que resulte más seguro. Además, al contratar este seguro, en el caso de que los propietarios alquilen el piso a un moroso, serán estos los que afrontarán los impagos.

¿Cómo puedo detectar a un inquilino moroso?

Además de lo previamente mencionado para evitar esta situación, existen unos indicadores que pueden alertar al propietario de si se encuentra o no ante un inquilino moroso. En el caso de que el candidato haya vivido de alquiler con anterioridad, pero no tenga referencias de otros caseros o da excusas para evitar ofrecer las referencias, lo más habitual es que haya acabado la relación con su antiguo arrendador de manera problemática.

Asimismo, otra situación que puede hacer saltar las alarmas es si el inquilino quiere pagar más mensualidades de las que le corresponde, ya que de esta manera intentan aparentar solvencia. No obstante, pese a que puede resultar tentador para el arrendador, esta es una de las tácticas más utilizadas por los morosos, ya que después de ese pago no vuelven a abonar ninguna cuantía más.

Otro de los aspectos a tener en cuenta es que el candidato tenga la documentación requerida como información económica o laboral, ya que si este da evasivas para no ofrecerla, es mejor buscar otro arrendatario que tenga la confianza del propietario.

Por último aquellos inquilinos morosos siempre intentarán dejar lo menos posible por escrito, intentando llevar a cabo contratos de palabra; por lo que no es de extrañar que intente evitar profesionales en el caso de que el propietario esté siendo asesorado por una compañía inmobiliaria, ya que de esta manera pasan más desapercibidos.