El consejo de administración del grupo de telecomunicaciones Ezentis ha acordado presentar preconcurso de acreedores debido a las tensiones de tesorería que viene sufriendo la empresa en los últimos meses. Según ha informado Ezentis en un comunicado a la CNMV, la empresa “se encuentra en una situación de insolvencia inminente, que podría devenir actual en las próximas semanas”. Por ello, el consejo de administración ha acordado presentar preconcurso de acreedores, tal y como ha informado la compañía al regulador bursátil, poniendo en conocimiento del juzgado competente la apertura de negociaciones con los acreedores para obtener adhesiones a una propuesta anticipada de convenio o para alcanzar un acuerdo de refinanciación que reúna los requisitos establecidos en la Ley Concursal.

Ezentis, que cuenta con 8.000 empleados, ha explicado que sin perjuicio de que el consejo viene trabajando en los últimos meses en un plan de viabilidad que pueda asegurar la continuidad de la sociedad y de sus filiales y habiendo recibido apoyo tanto por parte de su principal cliente como de las entidades financieras, “en la medida que las premisas necesarias para la viabilidad de la sociedad a día de hoy no se han podido garantizar (especialmente, la entrada relevante de caja), el consejo ha acordado presentar la comunicación de apertura de negociaciones con los acreedores”.

La firma explica que ha adoptado la decisión de presentar la citada comunicación tras recabar los asesoramientos externos y con la finalidad de “proteger los intereses de los acreedores y accionistas de la sociedad, habilitando un tiempo adicional para alcanzar los acuerdos necesarios con los acreedores de la compañía”.

En paralelo al preconcurso en España, Ezentis ha adoptado también la misma decisión para las filiales nacionales de la sociedad y ha informado de que la de Alemania ha presentado una declaración de insolvencia ante el organismo correspondiente.

Rechazo del rescate

Ezentis ha tenido que recurrir al concurso de acreedores después de que el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas que gestiona la SEPI le negase a principios de julio la ayuda de 70 millones de euros que había solicitado para hacer frente a su deuda de algo más de 150 millones de euros. Entre las entidades acreedoras de la firma se encuentran los fondos Arcano y Muzinich, así como un grupo de bancos formado por BBVA, Banco Pichincha, Banco Santander, Caixabank y EBN.

La compañía y los sindicatos consideraban “fundamental” esta ayuda del fondo público para solventar su delicada situación patrimonial, con un saldo negativo de 160 millones de euros, y su deuda. Ezentis había conseguido que sus acreedores suspendieran algunas obligaciones hasta que se determine el futuro del rescate y el lanzamiento de un plan estratégico.

Las acciones de Ezentis se encuentran hoy suspendidas de cotización después de que ayer perdieran un 1,06% de su valor. En lo que va de ejercicio han caído un 59%.